Los representantes del sector atribuyen esta merma productiva a condiciones meteorológicas adversas y a la escasez de materias activas para el control de malas hierbas, plagas y enfermedades

Andalucía destaca como la región con mayor incremento de superficie sembrada, con un 31% más. / ARCHIVO
Valencia Fruits. Redacción.
La Mesa Nacional del Ajo ha avanzado que la campaña actual, con 24.000 hectáreas sembradas, ha logrado recuperar superficie cultivada respecto a los últimos años. Sin embargo, pese a este incremento, las previsiones apuntan a que la producción será inferior a la del pasado ejercicio.
Durante la asamblea celebrada en Las Pedroñeras (Cuenca), los representantes del sector atribuyeron esta merma productiva a condiciones meteorológicas adversas y a la escasez de materias activas para el control de malas hierbas, plagas y enfermedades, una limitación que continúa tensionando la rentabilidad del cultivo.
En el análisis por comunidades autónomas, Andalucía destaca como la región con mayor incremento de superficie sembrada, con un 31% más. Este repunte responde, según Cooperativas Agro-alimentarias, a la recuperación parcial de la superficie perdida durante los años de sequía, que provocaron una fuerte contracción del cultivo en la comunidad.
Más allá de la superficie, los asistentes mostraron preocupación por “la pérdida de competitividad del ajo español”, una tendencia que se evidencia en un descenso continuado de las ventas durante las últimas cuatro campañas: un -17% en Europa y un -21% en mercados extracomunitarios. Paralelamente, las importaciones de la UE y de España de ajo procedente de terceros países siguen al alza, con incrementos del 68% y del 185%, respectivamente, en ese mismo periodo.
La reunión también sirvió para valorar el posible impacto de los aranceles de Estados Unidos sobre el ajo español. España aporta aproximadamente el 8% del ajo fresco consumido en ese país y se sitúa como el tercer proveedor de origen. En función del escenario final, las pérdidas estimadas para el sector podrían oscilar entre 4 y 20 millones de euros.
Ante este contexto, la Mesa Nacional del Ajo insistió en que es imprescindible que Europa adopte medidas para proteger la producción comunitaria, especialmente frente al aumento de importaciones y la creciente presión de costes. Asimismo, adelantó que las perspectivas de siembra para la próxima campaña podrían mantenerse en niveles similares o incluso inferiores a los actuales, debido a la escasa rentabilidad del cultivo y al elevado coste de producción.


