La demanda de un transporte combinado no deja de crecer, pero estos avances no contentan a todo el mundo
La vuelta del ‘tren primeurs’ supone alrededor de 10.000 camiones menos en las carreteras francesas, lo que contribuye a plasmar los planes del gobierno galo para reducir la huella de carbono. / © JC Milhet / Fret SNCF
Lucía Palencia. Redacción
El transporte por ferrocarril está altamente extendido en Francia. En el país galo son muchas las rutas por las que se distribuyen mercancías combinando este medio de transporte con camiones por carretera. Específicamente el transporte de productos frescos, como frutas y verduras, se realiza por medio de trenes especializados, como es el Tren de la Fruta Fresca.
En octubre de 2021 se reactivaba la ruta del “Train des Primeurs” que realiza el transporte de mercancías frescas desde la plataforma internacional de Saint-Charles en Perpignan al Mercado de Rungis (París), tras dos años de parón determinados por la falta de medios y clientes. Este regreso fue posible gracias al impulso del primer ministro francés de ese momento, Jean Castex, y la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses (SNCF), que ganó la convocatoria lanzada para la explotación de la línea ferroviaria hasta finales del año 2024 a través de su filial Rail Logistics Europe.
El tren, que está formado por 12 vagones frigoríficos con capacidad para 38 palets de fruta y verdura cada uno, circula únicamente 8 meses al año, entre noviembre y julio. Actualmente mantiene un nivel de llenado del 80%, esto quiere decir que el índice de ocupación ha ido en constante aumento (10 vagones, actualmente), según el director comercial de la División de Transporte Ferroviario de Mercancías de SNCF, Edouard Laverny Martin.
Quejas
A pesar de la positiva evolución que apunta Laverny Martin, no todo son buenas noticias. La ruta ferroviaria se reabrió anunciando que el servicio estaría disponible también para cargadores que operan ferrocarril-carretera, sin embargo, no se contactó con transportistas interesados y se dio prioridad al Grupo Primever —operador de transporte y logística, especialista en el sector hortofrutícola para Francia, Europa y el mundo—y el único que actualmente ocupa los vagones de la línea Perpignan-Rungis.
Desde la SNCF anuncian la apertura de nuevas autopistas ferroviarias en 2023, como la que unirá Sète y Calais
El proyecto de reactivación de la línea incluía en su momento también la creación de una autopista ferroviaria entre Le Boulou (Pirineos Orientales) y Gennevilliers (región parisina), con carga de semirremolques y contenedores en vagones especializados. Su puesta en marcha estaba prevista para finales del 2021, pero por problemas en la ruta la retrasaron a finales de este año. Ahora, desde la SNCF anuncian la apertura de nuevas autopistas ferroviarias en 2023, como la que unirá Sète y Calais. Su filial VIIA será la encargada de operar esta línea, que se suma a las anteriores que ya eran reguladas por la empresa, estas son: Le Boulou-Bettembourg, Le Boulou-Calais, Macon-Calais y Aitón-Orbassano.
La vuelta del ‘tren primeurs’ supone alrededor de 10.000 camiones menos en las carreteras, lo que contribuye a plasmar los planes del gobierno francés de reducción de la huella de carbono. Sin embargo, algunos expertos del sector transportes no creen que se le esté sacando rentabilidad. Desde la Federación de Trabajadores Ferroviarios (CGT Cheminots) lamentaban que se hubiese vuelto a poner en activo el tren con la mitad de los vagones y que circulase vacío al regresar a Perpignan. “Originalmente, algunos vagones en el camino de regreso estaban cargados con productos de distribución masiva”, afirmaba el delegado de CGT Cheminots, Michaël Meunier.
Otra de las quejas más sonadas fue la de que la circulación del tren se parase en julio y se retomase en noviembre, pues, es justamente en verano cuando se recogen las cosechas de los Pirineos Orientales. Esto provoca que los productores locales no puedan distribuir su mercancía por medio de este tren y que las frutas y verduras que se transportan los ocho siguientes meses proceden en su gran mayoría de España y Marruecos.
Cifras al alza
Los productos españoles llegan hasta esta ruta concretamente a través de la plataforma multimodal Perpignan Saint-Charles Conteneur Terminal (PSCCT) de contenedores y transporte combinado de Saint-Charles, gestionada por la sociedad anónima local con el mismo nombre. Debido a su proximidad a la frontera franco-española, la terminal proporciona fluidez al intercambio logístico norte-sur combinando tres medios de transporte, por carretera, ferrocarril y barco, a través de los puertos de Port-Vendres y Port de Barcelona y por la línea de alta velocidad y tráfico mixto entre Figueres y Perpignan.
El transporte combinado carretera-ferrocarril en Saint Charles ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años. En 2014 desde esta terminal se transportaban 21.659 cajas y este año se contabilizaron cerca de 60.000. La terminal, que antes solo manipulaba contenedores, ha pasado a transportar semirremolques, con un aumento anual del 20% en el transporte de estos. Los trenes realizan actualmente seis viajes de ida y vuelta, cinco días a la semana, incluidas las noches.
En octubre del año 2021 se reactivó la ruta del “Train des Primeurs” que realiza el transporte de mercancías frescas desde la plataforma internacional de Saint-Charles en Perpignan al Mercado de Rungis
Los resultados del ejercicio 2022 de la terminal son positivos y, tanto es así, que se han ampliado rutas como la de Perpignan-Kaldenkirchen (cerca de Düsseldorf). En octubre, el operador de esta ruta, CargoBeamer, ponía en marcha un servicio entre Kaldenkirchen y el puerto de Rostock para aumentar el alcance del transporte combinado de mercancías a países como Dinamarca o Finlandia, a donde llegan desde Rostock en ferry.
El gobierno francés también está tomando medidas para incrementar el transporte de mercancías mediante vehículos rodados. En julio se anunciaba que se permitiría combinaciones de hasta 46 toneladas en transporte combinado durante un año y medio. Esta medida permitiría sobrepasar los límites de peso y dimensiones de vehículos pesados dentro del territorio siempre que fuese como paso previo o posterior a un servicio combinado, en sus tramos iniciales o finales.
La medida se implantó a modo de ensayo para analizar el impacto que estas combinaciones causaban en el sector. Para ello el gobierno galo también previó la creación de un organismo evaluador de los resultados de estas experiencias, que analizaría el impacto de estos conjuntos sobre las infraestructuras viarias, la seguridad vial, la incidencia medioambiental, o las alteraciones en los costes del transporte por carretera que estas combinaciones pudieran provocar.
Mercado de rungis
El de Saint-Charles no es el único mercado que crece. El Mercado de Rungis (París) es el tercero más importante del país y Semmaris, la compañía que gestiona su funcionamiento, ha anunciado planes para aumentar las terminales logísticas del mercado. Concretamente tiene la intención de desarrollar una plataforma mixta ferroviario-carretera para 2024-2025. Esta plataforma multimodal de 120.00 m2 permitirá abastecer al mercado, al tiempo que se utilizará para transportar mercancía hacia el norte y sur de Francia. También está prevista la creación de tres líneas que irán a Avignon, Rotterdam y Amberes, entre otros.
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