El sector frutícola aragonés reclama medidas para mitigar la crisis

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Representantes del sector ha presentado una batería de propuestas al consejero de Agricultura para paliar la crisis de costes y la baja producción de este año

Fruta de hueso y la falta de mano de obra

En estos días comienzan las labores de aclareo y recolección en la campaña de fruta de hueso. / ARCHIVO

Valencia Fruits. Redacción.

La situación derivada del aumento de costes, el aumento de la energía y el gasoilunido a la incertidumbre de los mercados derivada de la guerra de Ucrania y la puntilla” asestada por las heladas tardías del mes de abril han dejado a la fruticultura de la Comunidad en una situación límite que para algunos productores puede suponer su desaparición. La consecuencia directa se traslada en la cadena también a los almacenes y las cooperativas que van a ver cómo mantener unos gastos fijos casi idénticos a otras campañas mientras ven reducidos sus volúmenes de operaciones al 50% o menos en muchos casos. Ello ha derivado en que hayan comenzado a oírse los primeros rumores de ERTEs, una herramienta de gestión laboral inédita en el sector hasta la fecha.

En ese contexto, Araga, Asaja, Cooperativas Agroalimentarias, Fedefruta Aragón, UAGA y UPA presentaron a Joaqu´ín Olona, Consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, una serie de medidas que consideran vitalesarticuladas en tres ejes fundamentales: una batería de ayudas directas a la producción para paliar el momento crítico en el que se sitúan; un segundo eje de ayudas a cooperativas, almacenes y OPFH, que en muchos casos van a mantener gastos fijos con la imposibilidad de cubrir su volumen de comercialización habitual; y, por último, una serie de propuestas para la reforma del seguro agrario que incida en hacer viable una herramienta que poco a poco va perdiendo fuelle y operatividad.

En definitiva, se espera algún movimiento de la Consejería, más si cabe cuando en otras comunidades autónomas se oyen rumores de importantes medidas que, en un sector tan globalizado, dejarían a la fruticultura aragonesa en clara desventaja.