El sector agroalimentario registró un superávit en la balanza comercial de 7.705 millones de euros entre enero y julio de 2017

El comercio exterior de frutas, hortalizas y legumbres es el que experimentó mayor crecimiento hasta julio.
Esta cifra supone un 9,1% más que en los siete primeros meses de 2016, con unas exportaciones por valor de 27.526,7 millones de euros (+8,8%) y unas importaciones de 19.821,2 millones de euros (+8,7%).
Así se desprende del último informe mensual de Comercio Exterior del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, que arroja para el mes de julio una caída del saldo agroalimentario del –28,3% (635,2 millones de euros), con salidas por valor de 3.540,9 millones de euros (+3,3%) y unas entradas de 2.905,7 millones de euros (+14,3%).
Durante el mes de julio se produjeron retrocesos en la exportación hortofrutícola (–1,6% respecto a julio de 2016) y en la de azúcar, café y cacao (–5,9%) e importantes subidas en la importación de aceites y grasas (+36,6%) y lácteos y huevos (+29,1%).
Los subsectores que obtuvieron entre enero y julio una tasa de variación anual (TVA) más negativa en su saldo comercial fueron el de azúcar, café y cacao (–23,7 %, –865,5 millones de euros) y el de los productos pesqueros (–14,7%, –1.606 millones de euros); el déficit comercial más acusado es el de “otros alimentos” (–1.847,4 millones de euros, +6,3%).
En contraste, el comercio exterior de frutas, hortalizas y legumbres, con un saldo de 7.770,5 millones de euros (+5%), es el que mayor superávit muestra hasta julio, aunque las mayores tasas de crecimiento correspondieron a aceites y grasas (1.289,9 millones de euros, +14,1%) y productos cárnicos (2.805,9 millones de euros, +14%).
Las exportaciones agroalimentarias de los siete primeros meses que más incrementaron su valor fueron las de aceites y grasas (3.049,1 millones de euros, +25,2%), lácteos y huevos (840,2 millones de euros, +14,9%) y productos pesqueros (2.264,2 millones de euros, +14%).
La venta en el exterior de frutas, hortalizas y legumbres, con 10.941,7 millones de euros (+5%), fueron de nuevo las que generaron más ingresos; en el capítulo de exportación, tan solo bajó la partida de tabaco (164,6 millones de euros, –2%).
Entre las importaciones agroalimentarias, destaca el repunte en aceites y grasas (1.759,2 millones de euros, +34,8 %), lácteos y huevos (1.150,2 millones de euros, +14,6%) y productos pesqueros (3.870,2 millones de euros, +14,3%).
Las entradas de “otros alimentos” (4.825,4 millones de euros, –0,3%) fue la de mayor valor y, junto a la de bebidas (1.001,9 millones de euros, –3%), fueron las únicas que retrocedieron durante los siete primeros meses de 2017 respecto al mismo periodo de 2016.
En la categoría de materias primeras, el comercio exterior de animales y vegetales registró un déficit comercial de 224 millones de euros (+23,3%), con unas exportaciones entre enero y julio de 1.692,2 millones de euros (+15,8%) y unas importaciones por valor de 1.916,2 millones de euros (+9,3%).
El total de exportaciones españolas alcanzó un valor hasta julio de 163.064,5 millones € frente a los 176.251,6 millones € de las importaciones.
Los abonos, clasificados entre los productos químicos, fueron los que registraron mayor alza de su saldo en la balanza comercial española (+892,9%), aunque su cuantía es muy reducida (47 millones de euros), con unas exportaciones que sumaron 478,5 millones de euros (+18,4%) y unas importaciones de 431,4 millones de euros (+8%).
Para el conjunto de las actividades económicas españolas, el déficit de la balanza comercial aumentó un 56,3% en los siete primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2016 y se situó en 13.187 millones de euros, debido fundamentalmente al incremento del déficit asociado a la importación de energía.
El total de exportaciones españolas alcanzó un valor hasta julio de 163.064,5 millones de euros (+9,1%) frente a los 176.251,6 millones de euros (+11,7%) de las importaciones.