La producción de aceituna de mesa será este ejercicio en torno a un 70% menor en Extremadura respecto al año pasado, debido a las condiciones climáticas, según ha advertido el presidente de Asaja Extremadura, Angel García Blanco

La campaña de aceituna d mesa extremeña finalizará a mediados de octubre.
En declaraciones a Efe, ha explicado que la campaña ya arrancó con unas previsiones que hablaban de una reducción de la producción, debido a la sequía de primavera y verano.
No obstante, las altas temperaturas de los últimos días han hecho que esas previsiones se hayan quedado incluso cortas, y si al principio de campaña se esperaba una producción un 40% menor a 2018, esta será finalmente un 70% más baja.
El calor de la pasada semana ha hecho que el fruto “no haya cogido ni peso ni calibre”, fundamentales a la hora de ser seleccionado para aceituna de mesa.
Una circunstancia a la que se une las escasas precipitaciones registradas durante septiembre, un mes donde las lluvias son “muy importantes” tras el rigor del verano extremeño.
De esta forma, mucha de la aceituna prevista inicialmente para verdeo irá directamente a la producción de almazara.
A tenor de todas estas circunstancias, Angel García Blanco prevé que la campaña “no dure más allá del próximo 15 de octubre”, pese a que arrancó hace algo más de una semana.
Este segmento se enfrenta además a los aranceles impuestos por el gobierno estadounidense de Donald Trump, los cuales han sido un “varapalo” durante el último año.
En un momento donde desde EEUU plantea nuevos aranceles a diversos productos de la Unión Europea, la aceituna de mesa sufre ya este problema desde agosto de 2018, lo que ha afectado a muchos municipios extremeños y andaluces.
Para Angel García Blanco “el campo es siempre quien soporta todos los vaivenes económicos y las problemáticas entre países, y está cansado de ser siempre el que pague estas luchas comerciales”.
Por su parte, los precios son algo más elevados que hace un año, según el máximo responsable de Asaja Extremadura.