El sindicato consigue el compromiso de una ayuda para la pera, con pérdidas del 60% por sequía y golpes de calor el 2023 que han afectado la floración de este año, e incluir la fruta dulce en secano en la ayuda de 800 €/ha para fruteros de zonas de embalses sin agua
Los productores de pera se enfrentan a una campaña muy complicada, con menos kilos y pérdidas de 7.205 euros por hectárea de media. / VF
Valencia Fruits. Redacción.
Después de dos años marcados por una grave sequía, Unió de Pagesos prevé que la campaña de fruta dulce de este año solo permitirá cubrir costes de producción, tanto por las granizadas, que afectaron mucho la Plana de Lleida, como por la carencia de agua que todavía sufren las zonas de los pantanos de Margalef, Riudecanyes y Guiamets en el Camp de Tarragona y las Tierras del Ebro. En este sentido, el sindicato ha conseguido que el Departamento se comprometa a destinar 800 euros/hectárea para los fruteros de las zonas de los embalses sin agua para regar, y pide ampliar la ayuda para los regantes del acuífero Fluvià-Muga, dado que también han sufrido restricciones, en el marco de un total de 70,8 millones por los daños de sequía del 2024 al conjunto del sector agrario.
Para los productores de pera todavía será una campaña más negativa, como advirtió el sindicato a final de agosto en un comunicado. Sequía, altas temperaturas y golpes de calor al 2023 incidieron en la formación de las flores que tenían que dar lugar a las peras. Este hecho ha rebajado los kilos en la mitad y las pérdidas son de 7.205 euros por hectárea de media; 56 millones en todo Cataluña. Además, a comarcas de Girona y en plena floración, en varios días sucesivos de abril llegaron por debajo de 0 °C, y el 24 de abril, a -4 °C. Unió de Pagesos ha conseguido el compromiso del Departamento de Agricultura de una ayuda a los productores de pera que permita paliar estos daños en floración y cuajado, no cubiertos por el seguro, y con presupuesto 2025.
En fruta de hueso, excepto en algunas zonas concretas, los árboles han tenido una buena floración, y en manzana, se espera que la cosecha sea similar a la media de los últimos cinco años
El sector ha sufrido dos episodios de granizadas que han afectado directamente la producción. El 8 de abril, en la Noguera, las Garrigues y el Pla d’Urgell, con más de 285 hectáreas afectadas, con daños entre el 30% y el 40%, sobre todo a pera y albaricoque. El 2 de mayo, en el municipio de Campllong (Gironès), afectó parte de la producción de manzana, y el 6 de julio, una tormenta con granizo afectó principalmente la zona media del sur del Segrià, con daños entre el 60% y el 100% en unas 1.400 hectáreas de fruteros, y también en estructuras agrarias, con árboles partidos e inundación de algunos campos. Por este motivo, Unión de Campesinos ha reclamado una adecuación de los módulos de ayuda y una mayor subvención de las ayudas a la instalación de sistemas de protección, como las redes antipiedra.
El sector ha sufrido dos episodios de granizadas que han afectado directamente la producción
Para los agricultures de fruta dulce que depende de los pantanos de Margalef, La Palma d’Ebre, Siurana, Riudecanyes y Guiamets, donde han muerto numerosos árboles, ha estado todavía más difícil. El sindicato ya alertó de esta situación el verano pasado. Después de la última reunión, Agricultura se comprometió a aprobar la ayuda a arranque y nueva plantación dentro del Contrato General de Explotaciones con el 100% de ayuda. Las operaciones de arranque mirarán de iniciarse este invierno. También garantizó el agua para los regantes de Guiamets hacia marzo-mayo del 2025, a pesar de que en Riudecanyes tardará más. Unió de Pagesos continúa pedido una ayuda para el periodo improductivo para los agricultores afectados.
El sindicato también alerta desde hace meses de la carencia de herramientas para garantizar una correcta sanidad vegetal de los cultivos por la pérdida de fitosanitarios autorizados en la Unión Europea y en el Estado, y sin disponer de alternativas. Esto comporta un incremento de pérdidas en el campo y de los costes unitarios de las plantaciones. Con las actuales herramientas es muy difícil hacer frente a plagas como la mosca de la fruta o la psila, enfermedades como la Stemphylium y el fuego bacteriano. Por eso, pide que se pare esta pérdida de productos hasta que no haya alternativas viables y que mejore el proceso de registro de fitosanitarios en España para poner fin a las trabas que hacen perder competencia respecto a otros estados miembros productores de fruta dulce.
En cuanto a los precios, en melocotón y nectarina ha vuelto a haber un encabalgamiento de cosechas entre diferentes zonas productoras del Estado que ha provocado que no remontaran por encima de los de la campaña pasada hasta la segunda quincena de julio. En manzana y pera, la poca producción a Europa hace prever buenas perspectivas. Sin embargo, hay que recordar que el sector ha tenido que hacer frente al incremento de los costes de producción que, en pera, el sindicato valora en 726,61 euros por hectárea.
El sector también se encontró con carencia de mano de obra disponible para trabajar en el campo. El sindicato ha insistido un año más en el Gobierno estatal que establezca mecanismos para poder contratar inmigrantes que ya están en el país pero que los productores no pueden contratar por carencia de permisos.
Por otro lado, las malas prácticas de grandes superficies en la hora de comercializar como de origen catalán peras de Bélgica y Holanda y melocotones de Turquía han llevado al sindicato a denunciar los hechos ante la Administración, y, en el caso de las peras, de manera reiterada, a una gran superficie de la Plana de Lleida.
Estas cuestiones las han explicado hoy en rueda de prensa en Lleida, en el marco de la Feria de San Miquel, Jaume Gardeñes, responsable de Fruta Dulce; Miquel Piñol, responsable de Sectores Agrícolas, y Carol Aixut, miembro de la Ejecutiva de la Plana de Lleida.
Unió de Pagesos adjunta un informe sobre datos de la campaña fruta dulce.
