La remolacha aumenta su superficie de cultivo hasta las 950 este año
Valencia Fruits. Redacción.
La organización agraria ARAG-ASAJA en colaboración con la Asociación de Investigación para la Mejora del Cultivo de la Remolacha Azucarera (AIMCRA) continúa con su labor en la investigación y mejora de la producción del cultivo de la remolacha en La Rioja. Así, la organización participa también este año en un estudio que trata de encontrar soluciones al control de plagas en la remolacha ante la prohibición del uso de neonicotinoides. El objetivo es garantizar la rentabilidad del cultivo de la remolacha en la zona norte de España.
En este sentido, la decisión del Ministerio de Agricultura, siguiendo las instrucciones de Europa, de prohibir el uso de estas sustancias utilizadas para proteger al cultivo frente a insectos, parásitos y plagas ha unido al sector remolachero en la búsqueda de alternativas viables que permitan seguir cultivando remolacha, con la misma eficacia que tenía hasta ahora este tipo de insecticidas.
Para esta campaña se han seleccionado los campos demostrativos de Castañares de Rioja y Cidamón en los que se están realizando diferentes estudios en base a estos objetivos:
– Nuevo manejo del cultivo de la remolacha azucarera sin la utilización de insecticidas neonicotinoides para el control de plagas.
– Establecimiento de trampas y una red de alertas que permita detectar la aparición de la plaga en las primeras fases.
– Evaluación de la eficacia de insecticidas foliares autorizados para el control de especies de pulgón transmisoras de la amarillez virosa de la remolacha.
– Evaluación de la resistencia a la amarillez virosa y rendimiento de nuevas variedades de remolacha.
Además, a lo largo de esta campaña, los técnicos de ARAG-ASAJA han formado a los agricultores en el manejo de herramientas como la red de avisos y la correcta identificación de las plagas y realización de los tratamientos.
Remolacha, un cultivo que amplía su producción en 2024
El cultivo de la remolacha ha visto aumentar su producción este año 2024 hasta alcanzar las 950 hectáreas. La campaña de recogida comenzó en la zona de La Rioja Alta el pasado 21 de octubre y, desde hoy, 29 de octubre, la fábrica de Azucarera en Miranda de Ebro recibirá la producción hasta el mes de enero, aproximadamente.
Borja García-Baquero, agricultor, lleva cultivando remolacha desde hace más de 20 años. Su explotación de 12 hectáreas se encuentra en Zarratón.
Como novedad en esta campaña, en la valoración de la remolacha sólo se tendrá en cuenta el peso de la raíz y no se medirá la polarización. “Este año se tomó esa decisión ante las dificultades de las dos anteriores campañas en las que la remolacha tenía poco grado de azúcar debido a la afección de enfermedades como la cercospora. Y para evitar que este cultivo se abandonara ante la baja rentabilidad, se optó por primar el peso frente al grado de azúcar (polarización)”, afirma.
“Antes no había tantas enfermedades y si a esto le añadimos unas normativas europeas cada vez más restrictivas en materia de tratamientos, vemos cómo la rentabilidad se ve mermada”
A pesar de ello, la rentabilidad para el cultivador sigue siendo muy justa. “Antes no había tantas enfermedades y si a esto le añadimos unas normativas europeas cada vez más restrictivas en materia de tratamientos, vemos cómo la rentabilidad se ve mermada”.