La cosecha de mango andaluz podría alcanzar las 35.000 toneladas, pero los productores apenas reciben entre 70 y 80 céntimos por kilo frente a los 6 euros que llega a pagar el consumidor

La diferencia de precio respecto al año pasado podría traducirse en pérdidas de hasta 12.600 euros por hectárea. / ARCHIVO
Efeagro.
La campaña de mango en Andalucía, actualmente en plena recolección, apunta a cifras récord con una producción estimada de 35.000 toneladas, el doble que el pasado año. Sin embargo, este aumento histórico llega acompañado de una fuerte caída en los precios en origen.
En la Axarquía malagueña y la Costa Tropical granadina —las principales zonas productoras de mango en España— los agricultores están recibiendo entre 70 y 80 céntimos por kilo, muy por debajo de los 1,5 euros de media alcanzados en 2024. Según cálculos de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA), esta diferencia puede traducirse en pérdidas de hasta 12.600 euros por hectárea respecto al pasado año.
El sistema de clasificación por calibres penaliza además a buena parte de la producción. Aunque los mangos de entre 400 y 800 gramos se pagan en torno a un euro, cerca del 20% de la cosecha queda por debajo de ese peso y pasa a considerarse destrío, cotizando entre 35 y 40 céntimos el kilo. El caso más extremo es el de los frutos de unos 300 gramos, que, pese a ser los más cómodos para el consumo, apenas se pagan a 12 céntimos en origen, mientras que en los lineales del supermercado el consumidor llega a pagar hasta 6 euros por kilo.
“El mango ha pasado de ser un producto estrella a dejar a los agricultores estrellados”, ha denunciado Francisco Pineda, secretario de Subtropicales de UPA Málaga, quien insiste en que los precios actuales están hundiendo a los pequeños productores.