La organización advierte de que la inclusión de fertilizantes en el mecanismo europeo encarecerá un insumo clave y generará “dumping climático” frente a productos de terceros países

Se trata de la aplicación del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM) que aumentará aún más el precio de los fertilizantes. / ARCHIVO
Valencia Fruits. Redacción.
La Unió Llauradora i Ramadera advierte de que la entrada en vigor plena del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM), aprobado por la Unión Europea en 2023 y cuyo periodo transitorio concluye el próximo 31 de diciembre, supondrá la aplicación total del Reglamento y provocará un nuevo incremento de costes para los agricultores, así como una pérdida adicional de competitividad frente a terceros países.
Tras analizar el impacto de la medida, La Unió señala que la inclusión de los fertilizantes entre los productos afectados por el CBAM, combinada con la eliminación progresiva de los derechos de emisión gratuitos para los fabricantes europeos, encarecerá directamente uno de los insumos esenciales para las explotaciones valencianas.
La organización explica que tanto los productores europeos de fertilizantes —que deberán asumir el coste de sus derechos de emisión— como los fabricantes extranjeros —sujetos al nuevo ajuste fronterizo— trasladarán ese sobrecoste al precio final. Esto implica que los agricultores europeos afrontarán un incremento de gastos que afectará a su rentabilidad y podría derivar en una nueva caída de la producción comunitaria.
La Unió subraya que, si la UE exige al sector agrario europeo objetivos cada vez más estrictos en materia ambiental y climática, pero permite la entrada de productos agrícolas de terceros países con estándares mucho más laxos y mayores niveles de emisiones, se genera un “dumping climático” que penaliza a los agricultores europeos y desincentiva la producción dentro del territorio comunitario. “Es pura hipocresía querer tasar los fertilizantes producidos en terceros países, pero no tasar los alimentos que se importan desde esos mismos países y que han usado esos mismos fertilizantes”, denuncia la organización.
El impacto económico es significativo: en España, el gasto agrícola en fertilizantes supera los 2.300 millones de euros anuales, lo que representa en torno al 7,5 % de los consumos intermedios. En regiones con cultivos de alto valor, como la Comunitat Valenciana, cualquier incremento adicional en el precio de estos insumos comprometerá la viabilidad de miles de explotaciones.
La Unió recuerda que los agricultores europeos se encuentran entre los más eficientes del mundo en términos ambientales y alerta de que la UE no puede impulsar políticas que, en la práctica, reduzcan la producción interna y aumenten la dependencia alimentaria de países con peores estándares climáticos y laborales. La organización insiste en la necesidad de ampliar el CBAM a los productos agrícolas y agroalimentarios y reclama medidas de apoyo específicas para el sector. La Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo (COMAGRI) ya ha advertido del riesgo de que el mecanismo termine reforzando la fuga de carbono en la agricultura, al encarecer los alimentos producidos en la UE frente a los importados.
Manifestación-tractorada el 18 de diciembre en València
En este contexto, La Unió ha convocado una manifestación-tractorada el próximo 18 de diciembre en València para denunciar que las políticas de la Comisión Europea, el Gobierno de España y la Generalitat están asfixiando al campo valenciano.






