Las heladas dañan frutales y almendros en Cataluña

Bayer estrategia de cítricos

La Unió de Pagesos pide a Agricultura una valoración rápida y cuidadosa de los daños

Los frutales son los cultivos más afectados por las heladas. / archivo

Valencia Fruits. Redacción.

La Unió de Pagesos alerta que las heladas de la madrugada pasada y de la del viernes al el pasado sábado han causado daños en frutales, y posiblemente en almendros, cereales, colza y viña, especialmente en la Plana de Lleida. Las comarcas más afectadas son Segrià, la zona del Baix Segre y de la Franja d’Aragó, les Garrigues, l’Urgell, la Noguera i el Pallars Jussà, donde las temperaturas de las dos últimas noches han oscilado entre los -5 y 1 grados.

En la Plana de Lleida, los cultivos más perjudicados son los de hueso, a pesar de que también puede haber sufrido daños la fruta de semilla, dependiendo del estado que se encontraban los árboles según las zonas. En Pallars de Jussà, las heladas también pueden haber afectado almendros y alfalfas. En cuanto a algunas zonas de la Segarra, los trigos de ciclo corto y la cebada más avanzada también podría resultar perjudicado, pero probablemente hasta de aquí en un mes no se sabrá. También puede haber quedado afectada la floración actual de la colza en diferentes zonas del país.

La viña es uno de los otros cultivos que ha sufrido alguna afectación tanto a la zona del Penedès como en otros territorios, pero el alcance del daño, como en otros cultivos, habrá que valorarlo en los días siguientes.

La Unió de Pagesos ha hecho esta primera estimación, pero habrá que esperar los próximos tres o cuatro días y conocer las horas que han durado las heladas para establecer la afectación.

Asimismo, el sindicato pide al Departamento de Agricultura una valoración rápida y cuidadosa, además de un seguimiento de estas afectaciones. Los daños pueden suponer fuertes pérdidas para todos los cultivos, a pesar de que con diferentes grados de afectación. La Unió de Pagesos afirma que, si se confirman los daños, se deberá indemnizar de manera justa a los agricultores afectados, así como aplicar medidas como la adecuación de la fiscalidad del IRPF a las pérdidas que se contabilicen.