El sector agroalimentario salva sus negocios en Reino Unido en un año crítico

DECCO PEPITA

Las empresas agroalimentarias y pesqueras españolas han mantenido sus negocios en el Reino Unido tras el Brexit

Puerto de Dover en Reino Unido. Efeagro / EPA / Andy Rain

Mercedes Salas. Efeagro.

Las empresas agroalimentarias y pesqueras españolas han mantenido sus negocios en el Reino Unido, quinto cliente de sus exportaciones, aunque con un incremento de la competencia y trabas como el colapso del transporte en 2021, primer año de la salida británica del mercado comunitario tras el Brexit.

Productores, exportadores, industria y flota pesquera destacan que el Reino Unido sigue y seguirá siendo un socio importante, cuando se cumple un año desde que se materializara el Brexit, el pasado 1 de enero, con las consiguientes tensiones políticas y dificultades logísticas, como la falta de transportistas o de mano de obra, entre otras.

Por ejemplo, las ventas españolas de alimentos, bebidas y tabaco al Reino Unido alcanzaron en octubre 345,02 millones de euros, lo que significa un repunte del 0,29% en lo que va de año, pero un descenso del 2,2% respecto al mismo mes de 2020, según los últimos datos de comercio exterior publicados por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.

España comercializó en el mercado británico productos por valor de 2.151,9 millones en 2020, según la patronal de industrias de alimentación y bebidas; frutas, cítricos, vino, aceite de oliva son los alimentos más vendidos.

“Observamos una caída de los volúmenes exportados por España y un fuerte crecimiento, muy preocupante, de competidores directos como Marruecos”, ha declarado el director general de la Federación de Productores y Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), José María Pozancos.

Preocupación por la competencia

Para los exportadores hortofrutícolas, el Reino Unido sigue siendo prioritario, aunque tras su salida de la UE está “más abierto” a competidores de otros países con los mismos productos y calendarios, como Marruecos, Egipto, Turquía y Sudáfrica.

Según datos del Departamento de Aduanas procesados por Fepex, las ventas exteriores de frutas y hortalizas españolas al Reino Unido bajaron un 0,8 % entre enero y septiembre, hasta 1,118 millones de toneladas.

En valor crecieron un 11%, hasta 1.581 millones de euros, por el incremento de los costes, de acuerdo con Pozancos.

Ha resaltado el crecimiento de la cuota de Marruecos en el mercado hortofrutícola británico, “del 400 % o 500% en frutos rojos”, mientras que en ventas de tomate ha desplazado a España como segundo proveedor, por detrás de Países Bajos.

A su juicio, los comercializadores españoles tienen que hacer un esfuerzo “muy significativo” para mejorar la competitividad, lo que se contrapone con la transición que está acometiendo la UE, hacia un modelo alimentario más “verde” pero con más exigencias al agricultor.

De cara a 2022, los exportadores están pendientes de las exigencias de certificados fitosanitarios que Reino Unido requerirá a partir del 1 de julio de 2022.

En cuanto a perspectivas de la demanda, Fepex augura que serán positivas porque el Reino Unido necesita abastecerse y tiene una mano de obra insuficiente, pero la concurrencia es preocupante.