Juan Miguel Montaner, miembro de la Ejecutiva de la Unió de Llauradors de Alicante, hace balance de la priemr aparte de la campaña citrícola en Alicante

Para Juan Miguel Montaner, nuestro modelo de producción agraria es un modelo de futuro, que enriquece nuestra agricultura y nuestras poblaciones. / S. Pascual
Santiago Pascual. Alicante.
Juan Miguel Montaner es un agricultor con el alma joven, que además de cultivar sus tierras, dedica un tiempo generoso a representar los intereses de agricultores y ganaderos de la provincia de Alicante. Comprometido en su totalidad con el futuro de la agricultura, lleva más de treinta años de sindicalista y recuerda como su familia lleva más de tres generaciones cultivando sus tierras.
Valencia Fruits. ¿Qué nos puede decir de la presente campaña de cítricos?
Juan Miguel Montaner. Tenemos una cosecha un poco menor que campañas anteriores, pero pese a ese dato, lo que perciben los agricultores, al menos hasta ahora, es un precio bajo para lo que les cuesta producir. Esperamos que en la parte de campaña de cítricos que resta se recuperen los precios y permitan a los agricultores continuar con sus cultivos.
Hay bastantes, más de los que desearíamos, agricultores que dejan la agricultura y eso no es bueno para nadie, ya que nuestro futuro depende de que haya muchos agricultores, citricultores que cultiven las tierras tradicionales con su saber hacer que ha pasado de padres a hijos y que, junto con todas las nuevas tecnologías y estrategias de cultivo nos tienen que posicionar ante los consumidores como lo que hemos sido siempre, muy buenos cultivadores de cítricos, de la mayor calidad y que han sido siempre muy bien aceptados por todos los mercados. No en vano somos el segundo país productor mundial de cítricos y el primer comercializador a nivel europeo.
Toda esa experiencia y trabajo realizado de cara al futuro tiene que servirnos para que los consumidores europeos y de otros mercados a los que acudimos, disfruten con nuestros cítricos y los prefieran a los que llegan de otras latitudes.
Es una realidad que los cítricos importados desde el hemisferio sur llegan a los mercados tras un tiempo de viaje, pero nos afectan al inicio de nuestra campaña porque ellos ocupan el hueco en las grandes superficies hasta bien entrado diciembre. Terminan su posible exportación a la Unión Europea en noviembre, pero los operadores comerciales hacen acopio de cosecha barata del final de su campaña y luego la ofertan a precios muy asequibles en ofertas que nos perjudican doblemente. Primero, porque están presentes en los lineales más tiempo del que debieran, y segundo, porque al ser cítricos de final de su campaña llegan a los mercados con precios más bajos, lo que perjudica gravemente al inicio de nuestra campaña de comercialización.
Gracias a que la sensatez reina en el sector y pasado ese período, que dicho claramente no debería existir, nuestros cítricos alcanzan las cotizaciones normales para su calidad.
Los consumidores europeos deberían valorar, primero, que nuestros cítricos son una producción europea; segundo, que nosotros mantenemos un medio natural y un arbolado que beneficia a nuestro medio ambiente; y tercero, que todos nuestros cítricos cumplen los protocolos de control de la calidad en el cultivo, en el envasado y en la puesta a disposición de los consumidores. Son cítricos sabrosos, de la máxima calidad y de cercanía, en comparación con los importados que generan una huella de carbono muy perjudicial para el medio natural.
Los nuestros están cultivados con criterios de sostenibilidad, respetando el medio natural y aportando a la naturaleza una cantidad de oxigeno de magnitudes extraordinarias siendo un verdadero sumidero de carbono, no suficientemente valorado por la sociedad en su conjunto y mantenemos un paisaje único en el mundo, porque a diferencia de las gigantes explotaciones de monocultivo industrial de otras latitudes, nuestros cítricos son un mosaico en los término municipales citrícolas de nuestra Comunidad, tampoco suficientemente valorado por la sociedad.
VF. ¿Es motivo de alegría la decisión adoptada por Bruselas recientemente en relación a la exigencia del tratamiento en frío para la naranja de importación?
JMM. Ciertamente sí. Ha sido un arduo trabajo de La Unió de Llauradors tratando de compilar todos los datos sobre detecciones de frutos llegados desde el hemisferio sur, desde Sudáfrica, infectados de plagas consideradas de cuarentena. Sobre todo en lo referente a Mancha negra, y a la Cochinilla de Sudáfrica. Pero desde el IVIA se conocen decenas de enfermedades y plagas que, de llegar a nuestras zonas de cultivo, causarían daños irrecuperables. Esperemos que eso no se trate de una estrategia de agresión comercial. Ya sabemos que los lobbys citrícolas de otras zonas productoras mundiales son muy activos y agresivos en las negociaciones y no dudarían ni un instante en causar todo el daño que pudieran si con ello saldrían beneficiados sus fondos de inversión y grandes multinacionales.
Nosotros tenemos otro modelo de agricultura y podemos garantizar un nivel de calidad y un compromiso con el territorio y con nuestro medio natural, creo yo, insuperables. Y eso debería agradecerlo el consumidor nacional y europeo aceptando costes que sean remuneradores para los agricultores, evitando la especulación sobres nuestras producciones. El agricultor debe percibir un precio por sus producciones absolutamente digno que le permita seguir en su actividad. Lo que no es aceptable es que al consumidor lleguen nuestras producciones a precios elevados, porque eso no se justifica.
“Nosotros tenemos otro modelo de agricultura y podemos garantizar un nivel de calidad y un compromiso con nuestro medio natural”
“El agricultor debe percibir un precio por sus producciones absolutamente digno que le permita seguir en su actividad”
El tratamiento en frío de las producciones del hemisferio sur evitará que lleguen a nuestras plantaciones plagas contra las que no tenemos defensa posible. El tratamiento con insectos depredadores debe ser una estrategia prioritaria, pero aún no disponemos de la cantidad suficiente y nos faltan medios que deberían surgir de la investigación y la experimentación. Cabe potenciar la defensa de nuestras plantaciones con medidas como las que ha aprobado la Unión Europea, ampliamente demandadas por el sector, pero también se debería potenciar mucho la investigación para que desde el IVIA y otros organismos se puedan obtener defensas reales para luchar contra esas amenazas de otras zonas productoras a nivel global.
VF. ¿Qué otras cuestiones preocupan a La Unió en la provincia de Alicante en relación a su socios citricultores?
JMM. Además de lo mencionado anteriormente, un tema que preocupa y que desde La Unió reivindicamos siempre es la disponibilidad en cantidad y calidad de agua de riego para nuestras tierras. Hace décadas teníamos al menos una cierta seguridad, pero con el crecimiento de las ciudades y zonas urbanas y con el crecimiento de otras demandas de agua como la turística e industrial, los agricultores quedamos un poco o bastante a la zaga y eso no debería pasar nunca. Para ello, se deben poner a disposición de los agricultores, y sobre todo de los agricultores de nuestra provincia, cantidades suficientes de agua de riego. No queremos aumentar los regadíos como van a hacer otras comunidades autónomas, tan solo pedimos tener agua de calidad y suficiente para regar nuestros cultivos. Tampoco queremos tanta agua como tienen otros agricultores de algunas comarcas de nuestra geografía, tan solo pedimos lo que necesitamos, ni un metro cúbico más, pero tampoco menos.
“No queremos aumentar los regadíos, tan solo pedimos agua de calidad y suficiente para regar nuestros cultivos”
Por otra parte es muy triste que otras zonas productoras tengan establecidos lobbys arraigados y con una capacidad de influencia realmente eficaz, que en muchas ocasiones nos han puesto en duda y que gracias a la profesionalidad de nuestros responsables hemos podido frenar a tiempo. Pero es de envidiar lo que tienen y sin embargo, nosotros parece que nos damos más importancia cuando van algunos a Bruselas a criticar al gobierno o sencillamente a intentar sacar barriga respecto de los demás. Y sinceramente creo, que eso no es de recibo. Creo que nuestros agricultores merecen que quienes vayan a Bruselas lo hagan con una altura de miras suficiente como para defender siempre a todos los agricultores, no a los suyos particulares. Ya sea Intercitrus u otra plataforma similar, debería contar con absolutamente todos para que cuando se fuera a Bruselas se fuera con una sola voz y con acuerdos realmente vinculantes. Solo así podríamos salir adelante en un futuro más que turbulento para nuestro sector.
“Nuestros agricultores merecen que quienes vayan a Bruselas lo hagan con una altura de miras suficiente como para defender siempre a todos los agricultores”
Tenemos que poner en valor la agricultura local y europea como valedores de nuestro patrimonio y de la forma de producción mediterránea.
Las macro granjas, como las macro explotaciones en manos de los fondos de inversión y multinacionales solo hacen que arruinar a miles de agricultores que cuidamos nuestras tierras y nuestro medio natural y patrimonio, porque es lo que nos identifica y porque nuestras tierras y nuestro trabajo dan como fruto una calidad extraordinaria.
Nosotros enriquecemos nuestra agricultura y nuestras poblaciones, aquellos empobrecen a miles de familias y luego de esquilmar los recursos, se marchan a otras zonas productoras. Nuestro modelo de explotación agraria es un modelo de futuro.