El calor de primavera lastra las previsiones iniciales de cereal extremeño

AgroFresh FRESCOS

Se han recogido entre 500 y 1.000 kilos menos de lo esperado por hectárea, dependiendo de la calidad de la tierra y la variedad de cereal

ayudas de la PAC

Ya se pueden solicitar las ayudas directas de la Política Agraria Común (PAC) para 2018. / Mapama

Efeagro. 

La campaña de cereal de este año en Extremadura ha registrado valores por debajo de las previsiones iniciales como consecuencia del calor acontecido durante primavera, aunque finalmente se han alcanzado cifras de producción similares a la media en la región.

El presidente de COAG Extremadura, Juan Moreno, ha explicado a Efe que las altas temperaturas vividas especialmente durante las primeras semanas de mayo han provocado que la producción en la campaña, ya finalizada, haya sido un 25 por ciento inferior en relación a las previsiones iniciales.

De esta forma se han recogido entre 500 y 1.000 kilos menos de lo esperado por hectárea, dependiendo de la calidad de la tierra y la variedad de cereal, por lo que se han alcanzado en global en torno a unas 900.000 toneladas en la región.

Se han alcanzado en global en torno a unas 900.000 toneladas de cereal en la región

Las previsiones de principios de año apuntaban a una cosecha altamente por encima de los valores medios, pero el calor del primer tramo de mayo ha hecho reducir la producción “incluso en aquellas hectáreas con mejores expectativas”.

Las altas temperaturas preocupan ahora en el caso del regadío, pues el intenso calor previsto para los próximos días “es especialmente relevante en un momento de carencia de agua como el actual”.

Las altas temperaturas preocupan ahora en el caso del regadío

En cuanto a precios, las cotizaciones han bajado durante las últimas tres semanas en el cereal, después de meses de subidas que permitieron la mejora de la situación en este ámbito tras años con precios “por el suelo”.

Esta tendencia bajista es “mala para el agricultor” sobre todo por el aumento de los costes de producción experimentado durante los últimos meses como consecuencia de la subida de los carburantes, los fertilizantes y de la luz.

Sin embargo, el escenario de precios a la baja “es bueno para la ganadería”, también muy afectada por los costes de producción.

Juan Moreno ha lamentado que “como cada año se produzcan decisiones, tomadas por los especuladores durante los periodos iniciales de las campañas, para engordar sus bolsas a costa de la rentabilidad de los agricultores y de los ganaderos”.

Desconoce si bajadas como la del cereal o la del petróleo “pueden ser un síntoma de que comience a bajar la inflación”, pero ha alertado de las repercusiones que tendría una recesión, entre otros motivos por los efectos que provocaría en el campo una bajada del consumo.