La organización agraria pide a Europa no ceder ante el chantaje del país marroquí que utiliza una crisis humanitaria para conseguir sus fines políticos

Marruecos se ha situado en el podio de las importaciones agroalimentarias. / ARCHIVO
Valencia Fruits. Redacción.
La organización agraria COAG Andalucía ha trasladado un escrito a las autoridades comunitarias exigiendo la inmediata paralización del acuerdo preferencial que, en materia de comercio agrícola, la Unión Europea tiene establecido con la dictadura de Marruecos, después de los acontecimientos ocurridos en la frontera española.
En declaraciones a los medios, el secretario provincial de COAG Almería y Representante Nacional de Frutas y Hortalizas de la organización, Andrés Góngora, ha defendido que “no se puede permitir que Europa mantenga con una dictadura como la marroquí, sin escrúpulos en utilizar para sus fines políticos la crisis humanitaria de migración de personas -incluidos niños- de África a Europa, un acuerdo comercial semejante que, además, solo beneficia a los fondos de inversión y a la oligarquía de Marruecos”.
Es por todo esto que la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG de Andalucía exige que se suspendan de inmediato los acuerdos comerciales con el país africano, una demanda que será trasladada, a su vez, a los euro-parlamentarios españoles y a las autoridades gubernamentales competentes.
Desde COAG, “esperamos que, de una vez por todas, España y Europa entren en razón y no sucumban al chantaje marroquí”, indicó ayer Góngora al respecto de los tristes sucesos ocurridos ayer en la frontera española.
Primer proveedor
Cabe destacar que las importaciones procedentes de Marruecos crecen de manera exponencial debido a los acuerdos que el país tiene con la Unión Europea. Estos acuerdos “laxos” provocan una desestabilización del mercado nacional así como el hundimiento de los precios y agricultores. Sin mencionar las menores exigencias fitosanitarias y controles que ha de pasar el país marroquí en comparación de la producción española. La paralización inmediata de este acuerdo supondría un respiro para el sector agrario nacional.