España suma diez “Entidades Asociativas Prioritarias” que están impulsando la dimensión del sector cooperativo para competir en el mercado
Acto de reconocimiento a cuatro nuevas Entidades Asociativas Prioritarias. / Mapama
El proceso de concentración de la oferta de productos agrícolas y ganaderos, liderado por las “Entidades Asociativas Prioritarias” (EAPs), se extiende “como una mancha de aceite” por el rural nacional, dotando al sector cooperativo de dimensión más relevante para competir en el mercado.
La ley de fomento de la integración de cooperativas y otras entidades asociativas ha ayudado, en tan sólo unos años de vida, a impulsar la dimensión empresarial a través de estas figuras de ámbito supra-regional, que conviven con otros movimientos de concentración que prosperan en cada comunidad autónoma por separado.
España suma diez de estas EAPs —con presencia en más de una autonomía—, candidatas a recibir ayudas del programa nacional de desarrollo rural por más de 200 millones de euros hasta 2020. Se trata de Oviaragón, Ibercom, Ovispain, Indulleida, Dcoop y AN, a las que se unen —tras la entrega, ayer mismo, de reconocimientos de manos de la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, en Madrid— Consorcio de Promoción del Ovino, Cobadu, COVAP y Unió Coportació Alimentària.
Entre las diez, integran a 310 cooperativas de base —con 130.000 socios— que operan en 15 comunidades autónomas y facturan 2.800 millones, cifra que crecerá de forma exponencial gracias a la mejora de sinergias, ahorro de costes, diversificación y nuevos mercados.
El gerente de Consorcio de Promoción del Ovino, José Antonio Asensio, ha avanzado a Efeagro que tienen previsto invertir unos 9 millones de euros en los próximos cinco años para impulsar la actividad de la firma, que es ya la primera cooperativa europea en este sector y que quiere consolidarse como gran comercializadora.
Asensio ha subrayado que cuentan hoy con 850 socios distribuidos en 180 municipios de Castilla y León, Navarra y Castilla-La Mancha; comercializan 65 millones de litros de leche de oveja al año, 150.000 lechazos, 8.000 cabezas de ganado vacuno y 50 millones de kilos de materias primas; y facturaran 90 millones de euros, cifra que podría dispararse hasta los 140 millones en tan sólo cinco años.
Tras recoger el reconocimiento de EAP en “Alimentación animal, leche y productos lácteos, porcino ibérico y vacuno de carne”, el presidente de COVAP, Ricardo Delgado Vizcaíno, ha avanzado, por su parte, que ya piensan en dar nuevos pasos de concentración. Aspiran ahora a conseguir la misma catalogación, como EAP, pero de forma global o multisectorial, porque COVAP está más cerca de llegar a los 525 millones de facturación que exige la normativa.
La búsqueda de valor añadido para sus socios del Valle de los Pedroches (Córdoba), sur de Extremadura y de Castilla-La Mancha, es el máximo objetivo de COVAP, gracias al desarrollo de proyectos industriales y de comercialización, ha añadido Delgado.
Por otra parte, y sobre la vieja idea de COVAP de explorar fusiones con otras cooperativas andaluzas (Agrosevilla o Dcoop), el presidente ha destacado que en los tres casos han desarrollado un modelo de éxito y, aunque ahora mismo “no nos estamos planteando nada” en esa línea, “nunca lo descartamos. Estamos abiertos a todo”.
“De 300 socios iniciales, ahora tenemos más de 10.000. Cada año se suman 450 o 500 nuevos, fundamentalmente de Castilla y León y zonas limítrofes”, ha añadido el gerente de Cobadu, Rafael Sánchez.
Las ayudas públicas que conseguirán como EAP permitirá a la compañía seguir invirtiendo en instalaciones de la actividad agraria y ganadera y, con ello, mejorar la rentabilidad en el campo.
El director general de Unió Coportació Alimentària, Ferran Huguet, ha abogado por concentrar la mayor oferta posible de frutos secos, como la almendra, para su comercialización en común, adaptándose así a clientes globales, en muchos casos grandes compañías o multinacionales de los chocolates, helados o repostería.
Para Huguet, España debe ganar en eficiencia para depender menos de las importaciones de California y, por tanto, anima a más cooperativas a que se sumen a este proyecto de concentración.
Con presencia ya en varias comunidades autónomas —Cataluña, Comunidad Valenciana, Aragón, Murcia, Baleares, Andalucía o La Mancha—, Unió Coportació Alimentària opera en almendra y avellana, sobre todo, pero ampliarán actividades en pistacho o algarroba.
En el conjunto del cooperativismo español, las 10 EAPs reconocidas suponen casi el 11% de los socios de base, cerca del 10% de las cooperativas, y el 10,83% de la facturación total.
En España coexisten aún 3.300 cooperativas, que concentran a un millón de socios agricultores y ganaderos, y son responsables del 60% del valor de la producción agraria y ganadera.
