Francesc Pàmpols, director de Pampols Packaging Integral, repasa las principales novedades de la firma para el presente año, entre las que destaca la construcción de una nave en Picassent (Valencia)

Ejemplos de envases de cartón, versátiles y personalizables. / Pampols
Óscar Ortega. Barcelona.
Este 2025 viene cargado de novedades para Pampols Packaging Integral. Además de celebrar su 40 aniversario, esta empresa de envasado y embalaje alimentario ya está recogiendo los primeros frutos tras implementar a varios clientes un sistema de verificación de etiquetaje que permite detectar en tiempo real códigos de barras erróneos y otras incidencias en las etiquetas. Además, han empezado las obras de su nueva nave en Picassent (Valencia) y próximamente doblarán las líneas de fabricación y montaje de bandejas kraft en sus instalaciones de Vilanova de la Barca, en Lleida.
La novedad más destacable es, siguiendo su apuesta por el crecimiento e innovación, la construcción de una nueva nave de 3.600 m2 en Picassent, en Valencia, con el objetivo de fortalecer su capacidad operativa en la zona. En palabras de Francesc Pàmpols, su director, “este nuevo proyecto refleja el firme compromiso de Pampols de mejorar la cobertura y prestar un mejor servicio a nuestros clientes de Levante”. Con la incorporación de estas nuevas instalaciones en Valencia, Pampols Packaging Integral suma más de 30.000 m2 de superficie operativa entre sus centros en Lleida, Valencia y sus delegaciones comerciales.
Flexibilidad
La firma ha adquirido a lo largo de su trayectoria un profundo conocimiento de las necesidades de los operadores hortofrutícolas. Con esta experiencia, su director define que “en cualquier alimento a envasar es fundamental ser flexible a las demandas del cliente” y que “cada envase debe estar diseñado para garantizar la protección y conservación del producto y minimizar el impacto ambiental”. En cuanto al consumidor, apunta que los clientes buscan “envases que sean más sostenibles, asequibles y de alta calidad”.
Al mismo tiempo, la hora de envasar, exponer y transportar las frutas, se deben tener en cuenta algunos aspectos importantes que condicionan la elección del tipo de solución. Estos condicionantes se pueden englobar en tres grandes grupos: las características específicas de cada fruta; el mercado de destino; y, por último, el tiempo transcurrido desde la cosecha hasta el punto de venta.
Ahora que arranca la campaña de fruta de hueso, para melocotones, nectarinas o albaricoques, las propuestas de envasado más solicitadas suelen ser cestas de cartón microcanal o nanocanal y cestas fabricadas con rPET, cerradas con malla o flowpack biodegradable “y solemos servir muchos alveolos, tanto de celulosa como de rPET”, comenta Pàmpols. En el caso de las cerezas, “también es aplicable la misma tendencia, aunque los formatos suelen ser más pequeños”. En cambio, para la exportación, los clientes optan por bolsas de atmosfera modificada.
Certificaciones
Para Pampols Packaging Integral los certificados de calidad son un factor diferencial. De hecho, es la única empresa española de packaging que cuenta con 6 certificaciones (BRC Storage & Distribuiton, BRC Packaging Materials, ISO 9001 y 14001, IFS Logistics y FSC Cadena de Custodia).
Como expresa Francesc Pàmpols, “obtener estos certificados conlleva mucho esfuerzo, pero es un valor añadido que ofrecemos a nuestros clientes y una garantía hacia nuestro compromiso por seguir mejorando día a día y adaptarnos a las normativas cada vez más estrictas de la industria alimentaria”. También ha obtenido recientemente la certificación SMETA, auditoría referente en el mundo que evalúa las prácticas laborales, de salud y seguridad de las empresas.
Automatización
Además del sistema de verificación de etiquetas a través de softwares y cámaras de foto punteras, un proceso fundamental en la industria alimentaria, Pampols está aprovechando el potencial de la tecnología para optimizar costes y recursos en todo el proceso de envasado y embalaje hortofrutícolas. Equipos de triaje, pesado, enmallado o de cierre son algunos de los módulos que más instala esta empresa de envasado y embalaje alimentario en las centrales hortofrutícolas para incrementar la productividad en el proceso de envasado. “Un aspecto muy positivo de la automatización es que puede implementarse por fases”, detalla Francesc Pàmpols. Además, si se utiliza bien, la tecnología es una herramienta “clave para anticiparte a posibles errores e incidencias”.
Acceso a la entrevista en la página 13 del dossier de Fruta de Verano II en el ejemplar de Valencia Fruits.
Acceso íntegro al último ejemplar de Valencia Fruits.