Entrevista al Director comercial de Frutínter, Jordi Bosch
Óscar Ortega. Barcelona.
Frutínter es una compañía comprometida con la innovación en el sector hortofrutícola a todos los niveles. De hecho, participa activamente en un proyecto sobre nuevas estrategias de biocontrol contra los principales hongos que afectan en la postcosecha de los cítricos y están desarrollando investigaciones basadas agricultura 4.0. Durante la entrevista, Jordi Bosch también analiza cómo se está desarrollando la campaña citrícola.
Valencia Fruits. ¿Qué papel juega Frutínter en el proyecto que desarrollará nuevas estrategias de biocontrol contra Penicillium digitatum y Galactomyces citri-aurantii?
Jordi Bosch. Frutínter es partícipe en el proyecto de investigación Postharvestlife junto a tres prestigiosos socios colaboradores, el Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos (IATA-CSIC), el centro tecnológico AINIA, y la pyme Darwin Bioprospecting. Como empresa, estamos totalmente comprometidos con los últimos avances en innovación dentro de nuestro sector a todos los niveles, en ser agentes impulsores de los mismos y en que se lleven a cabo en nuestras instalaciones.
Las nuevas estrategias de biocontrol contra los principales hongos que nos afectan en la postcosecha de los cítricos tienen mucho sentido para una empresa como la nuestra tan enfocada a la comercialización de los mismos. El tratamiento tradicional de control contra Penicillium spp y Galactomyces citri-aurantii ha sido a base de fungicidas sintéticos. Pero teniendo en cuenta la demanda de la sociedad actual y la estrategia de la Unión Europea ‘Farm to fork’, dentro del Pacto Verde Europeo, que tiene como objetivo reducir drásticamente el uso de plaguicidas químicos, desde Frutínter creemos firmemente que el futuro debe entenderse teniendo muy en cuenta nuevas estrategias de tratamiento, como el biocontrol a base de microorganismos beneficiosos.
VF. Durante los últimos años están dando pasos en agricultura 4.0. ¿Por qué?
JB. En el mismo sentido y teniendo en cuenta todos los avances en innovación disponibles a nivel de cultivo de cítricos, desde nuestra empresa creemos que la colaboración con la Universidad Politécnica de Valencia en el marco de nuestra Cátedra Frutínter, ha sido determinante para aumentar el conocimiento sobre las “necesidades de los árboles en tiempo real”. El término Agricultura Smart o 4.0 para nosotros significa el poder aunar el conocimiento del clima, el suelo, el agua y el estado de la planta en cada momento para tomar las decisiones adecuadas. Fruto de estas investigaciones se han podido trasladar a la sociedad las mejoras obtenidas en cuanto la gestión del agua y del abonado para aprovechar al máximo la eficacia en su uso, así como el poder cultivar cítricos con la garantía certificada de que no contaminamos el subsuelo con nitratos, con nuestro proyecto Huella de Nitrato.
A nivel de producción en campo creemos firmemente que la agricultura 4.0 es la que nos va a llevar a poder cultivar fruta con mayor calidad, mejor condición, más barata y más sostenible con nuestro medioambiente.
VF. Cambiamos de hilo, ustedes están presentes en las principales ferias del sector. ¿Principales objetivos de estas participaciones y su valoración posterior?
JB. La participación en las ferias está orientada a reunirnos con los clientes en un mismo punto de encuentro para consolidar las relaciones comerciales y hablar de los planes que tenemos en común, así como la captación de potenciales clientes y dar visibilidad a la empresa Frutínter con todos los nuevos avances tecnológicos que implementamos en nuestras plantas de confección y en el cultivo, nuevos proyectos, nuevas variedades, planes estratégicos… así como dar visibilidad a las marcas de la compañía.
VF. En el terreno comercial, y como productores y comercializadores de naranja y mandarina de producción nacional, ¿qué análisis realizan de la campaña hasta la fecha?
JB. En cuanto a las naranjas, durante las primeras semanas de la campaña teníamos un mercado prácticamente vacío y el mercado tuvo un buen comportamiento. Esa alegría en la demanda ocasionó compras altas en el campo para variedades como la Lane Late, pero no contábamos con el factor Egipto, que ha acabado inundando los mercados de Europa y de la mayor parte del mundo en esta segunda campaña, ralentizando y afectando a la venta de Lane Late y Valencia Late española. Además, también nos hemos encontrado con el bloqueo del mar Rojo, lo que nos ha impedido o dificultado las ventas hacia los países asiáticos y de Oriente Medio.
Para las mandarinas, ha pasado el efecto contrario, existiendo mandarinas del hemisferio sur, ha costado bastante catalizar la venta de la mandarina española, excepto la que es con hoja. La cantidad de volúmenes de mandarina ha hecho que el mercado no las absorbiera, y se han ido solapando las variedades, y ante la presión y muchos calibres pequeños poco comerciales, no se han conseguido precios interesantes en general.
VF. Desde sus paradas en el Mercado Central de Frutas y Hortalizas de Mercabarna, ¿qué oferta presentan y cuáles son los principales perfiles de clientes?
JB. Nuestra oferta continúa siendo la representación de nuestras marcas en cítrico, melón y sandía, y consolidar nuestro catálogo del resto de productos a través de nuestros productores asociados. Nuestro perfil de cliente es muy diverso: distribución organizada, canal Horeca (con especial crecimiento estos últimos años), y clientes del resto de Europa. Este sería el perfil principal de nuestros clientes.
VF. Para finalizar, ¿qué objetivos tienen para el presente año?
JB. Seguir la línea de crecimiento de los años anteriores, consolidar nuestro catálogo de productos e incorporar alguno más que nos demandan nuestros clientes. En resumen, somos una empresa de servicio y nuestro principal objetivo es satisfacer las necesidades de nuestros clientes y aportarles valor añadido para poder crecer conjuntamente con ellos.
Acceso a la entrevista en la página 15 del dossier de Mercabarna en el ejemplar de Valencia Fruits.
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