Entrevista al director Comercial y Operaciones de Grupo Europlátano, José Perlés
En la imagen, Antonio J. Luis Brito, director gerente de Europlátano, y José Perles, director Comercial y Operaciones del grupo. / ÓSCAR ORZANCO
Óscar Orzanco. Redacción.
Europlátano lleva unos años desarrollando un proyecto de expansión con el que llegar de manera directa a los clientes, controlando todas las fases del proceso desde el campo hasta la comercialización. Para lograr este objetivo contaba con instalaciones de maduración en Tenerife y Alicante. Ahora, en el segundo trimestre del año, el grupo ha dado un paso más y duplica su capacidad con una nave de nueva construcción en Orozco (Vizcaya).
La compañía ha puesto en marcha una nueva planta que, junto con la que ya gestionan en Alicante desde finales de 2020, permitirá a los agricultores de Europlátano abarcar directamente todo el mercado peninsular, controlando así la calidad y trazabilidad, y todo el proceso que sigue el plátano hasta que llega al consumidor final. De momento, ya se ha empezado a dar servicio a los clientes desde las nuevas instalaciones, pero no será hasta septiembre cuando comiencen a funcionar al 100% de su capacidad.
Valencia Fruits. ¿Con qué objetivo han realizado la inversión de la puesta en marcha de una nueva planta de maduración de plátano en Orozco (Vizcaya)?
José Perles. Nuestro objetivo es llegar al cliente final, y por ello en Europlátano estamos impulsando todo el proceso de maduración de la fruta que nosotros mismos producimos. Al final se trata de cerrar el circuito y tener toda la cadena logística bajo control, desde el agricultor hasta que el plátano llega al consumidor, desde el campo hasta el cliente final. Estamos implantando un modelo de negocio directo entre los productores y los clientes, con el objetivo de consolidar el mercado peninsular.
Para lograr alcanzar este objetivo comenzamos con una planta en Alicante a finales de 2020. La experiencia ha sido positiva, y por ello nos hemos decidido a abrir estas nuevas instalaciones en Vizcaya, con una planta que permitirá abastecer de plátano al norte de España, que incluye la cornisa cantábrica y Galicia.
Además, nos facilitará la exportación, ya que contaremos con un almacén que se encuentra ubicado a 150 kilómetros de la frontera, y nos permitirá abordar los envíos al mercado europeo.
VF. ¿En qué fase se encuentra ahora mismo la planta?
JP. Desde la planta estamos sirviendo ya a clientes, pero está funcionando a un 20% de su capacidad. Ahora mismo estamos todavía en fase de pruebas, comprobando que todos los engranajes funcionan bien. Prevemos que en septiembre o el mes de octubre comience a funcionar al 100% de sus posibilidades, sobre todo debido a la escasez de fruta que va a haber hasta esas fechas.
VF. ¿Qué capacidad tiene la planta exactamente?
JP. La planta está preparada para gestionar 800.000 kilos semanales de plátano. La nueva nave cuenta con una superficie de 5.500 metros cuadrados, 21 cámaras de maduración y una amplia sala de expediciones.
VF. ¿Tienen previsto continuar expandiéndose con nuevas instalaciones en la península?
JP. No hay proyectos para continuar expandiéndonos con nuevas instalaciones. Ahora mismo con las plantas de Alicante y Orozco (Vizcaya), y la logística que existe actualmente, no vemos la necesidad de ampliar más.
VF. ¿A qué se debe la escasez de plátano en estos momentos de la campaña?
JP. A varios factores. Desde que en 2021 se produjo la erupción del volcán en La Palma no hemos tenido un año normal.
En la campaña 2022-23 hubo sobreproducción y se alcanzaron volúmenes de cosecha récord. En el ejercicio 2023-24 ya se produjo un ‘hueco’ productivo, y en la 2024-25 la falta de plátano está siendo más larga en el tiempo y se ha acentuado por los temporales que tuvimos en diciembre y enero, y un invierno más frío.
Entre las causas también se encuentra la falta de agua, algunas fincas abandonadas por los agricultores porque tenemos un problema de relevo generacional, o el cambio climático. Al final, la unión de todos estos factores ha provocado que, esta falta de producto que se debería de producir en julio y agosto, cuando la demanda baja, la estamos sufriendo también desde marzo hasta junio.
No existe una única causa que explique este hueco productivo. Hay un una serie de factores, como los comentados, que han cambiado el ciclo de producción a otra época de año.
VF. ¿Qué problemas está generando está escasez de plátano?
JP. Cuando se analiza el volumen de cosecha anual, la caída no resulta tan llamativa. El problema es que está faltando plátano cuando más se necesita. El descenso está siendo muy acusado en los meses de más consumo, cuando otras frutas ya han acabado y el plátano es prácticamente el rey en la cesta de la compra en esta categoría hasta que empieza con fuerza la fruta de verano.
VF. Ante esta escasez, ¿cómo se están comportando los precios?
JP. Los precios son altos, y en esta vorágine los plataneros estamos mirados con lupa. Pero estas cotizaciones tan elevadas tampoco son buenas para el sector. Ahora mismo se premia al que tiene plátanos, no al que tiene producto de calidad.
Ante estos precios el consumo se resiente, coge más peso en el mercado la banana, y recuperar luego esa cuota cuesta y se logra a base de precio. La situación ideal para el plátano es contar con una estabilidad durante los 12 meses del año buscando el equilibrio entre oferta y demanda, y tener un precio razonable y justo para toda la cadena.
VF. ¿Cuáles son los objetivos de Europlátano para el futuro?
JP. Nuestro objetivo es consolidarnos en el mercado peninsular como maduradores de nuestras producciones. Tenemos que conseguir que en Canarias esto se nos reconozca y cada vez más agricultores quieran pertenecer a nuestra OPP.
Necesitamos tener una cadena de valor justa para todos. Al final lo que nosotros buscamos es que el agricultor esté reconocido y recompensado para que pueda seguir invirtiendo en sus plantaciones para ofrecer un producto con elevados estándares de calidad y de sabor, aspectos que diferencian al plátano de la banana.
Acceso a la entrevista en la página 12 del dossier de Euskadi en el ejemplar de Valencia Fruits.
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