La organización denuncia que la actual normativa europea genera opacidad, perjudica a los productores valencianos y confunde al consumidor

La Unió anima además a los consumidores a revisar siempre el etiquetado y a exigir que se especifique claramente el país de cultivo del arroz. / LA UNIO
Valencia Fruits. Redacción.
La Unió Llauradora, con su secretario general Carles Peris al frente, ha trasladado en Bruselas a diferentes instituciones comunitarias la urgente necesidad de modificar la normativa de etiquetado para que el arroz comercializado en la Unión Europea indique de forma obligatoria el país de cultivo en la etiqueta. La ronda de reuniones se ha realizado con la Comisión Europea, a través de la Dirección General de Salud y Seguridad Alimentaria (DG SANTE), con la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo y con la Federación de Consumidores Europeos, gracias a las gestiones del eurodiputado valenciano de Compromís, Vicent Marzà, quien acompañó a la delegación de La Unió.
En la actualidad, el arroz comercializado en la UE puede envasarse en España o en cualquier país comunitario, aunque haya sido cultivado fuera, sin que el consumidor lo sepa
El informe presentado por la organización analiza la normativa vigente, expone los efectos negativos del sistema actual y propone una modificación concreta para subsanar esta laguna jurídica. En la actualidad, el arroz comercializado en la UE puede envasarse en España o en cualquier país comunitario, aunque haya sido cultivado fuera, sin que el consumidor lo sepa. Esta opacidad en el etiquetado perjudica gravemente a los productores valencianos, ya que el arroz importado, producido con menos garantías y a menor coste, fomenta la competencia desleal con terceros países, hunde los precios en el campo y limita el derecho del consumidor a recibir una información veraz y clara.
La propuesta de La Unió es elaborar un reglamento delegado específico para el arroz que obligue a declarar el país de cultivo en el etiquetado, independientemente del lugar de transformación o envasado. Según la organización, esta medida es imprescindible para garantizar la transparencia, la trazabilidad real, la protección del consumidor y la competitividad del sector productor europeo.
La propuesta de La Unió es elaborar un reglamento delegado específico para el arroz que obligue a declarar el país de cultivo en el etiquetado, independientemente del lugar de transformación o envasado
En este sentido, La Unió denunció en Bruselas que la UE exige indicar el origen en productos como frutas y hortalizas, carne, miel o aceite, pero no en el arroz. Esto supone una discriminación injusta para el sector arrocero valenciano, ya que la falta de transparencia impide al consumidor elegir con información real y rompe el vínculo de confianza entre productor y consumidor.
El informe reclama que la normativa obligue a indicar el país o países de cultivo en la etiqueta del arroz, siguiendo el modelo de otros productos alimentarios. “Exigimos a la Comisión Europea y al Parlamento Europeo que acaben con esta injusticia. El consumidor tiene derecho a saber de dónde viene el arroz que compra y el agricultor valenciano merece competir en igualdad de condiciones. Sin transparencia, la trazabilidad es una ilusión y la supervivencia del sector está en peligro”, subrayó Carles Peris.
La Unió anima además a los consumidores a revisar siempre el etiquetado y a exigir que se especifique claramente el país de cultivo del arroz. Peris insistió en que “la adopción de un reglamento delegado específico para el arroz, que obligue a declarar el país de cultivo en el etiquetado, constituye una medida imprescindible para que la normativa europea cumpla su objetivo de proteger al consumidor y al productor. Es necesario asegurar una trazabilidad real del producto para reforzar la confianza en la cadena alimentaria y contribuir a la sostenibilidad y competitividad del sector arrocero europeo”.
El arroz es un cultivo estratégico en diversas regiones de Europa, tanto por su relevancia económica como por su función medioambiental en humedales, marismas y deltas. Pese a ello, el etiquetado actual no obliga a informar sobre su país de origen, salvo cuando pueda inducirse a error o cuando el producto esté amparado por una Denominación de Origen Protegida (DOP) o una Indicación Geográfica Protegida (IGP).
El arroz es un cultivo estratégico en diversas regiones de Europa, tanto por su relevancia económica como por su función medioambiental en humedales, marismas y deltas
Es común encontrar en los supermercados europeos arroces envasados en países como España pero cultivados en terceros países como Vietnam, Pakistán, India, Camboya, Uruguay o Myanmar. En muchos casos, el origen real no aparece indicado, ya que la normativa permite señalar únicamente el nombre del envasador y su dirección, como “envasado por X, Valencia, España”. A esto se suman imágenes neutras o confusas —como barracas valencianas o falleras— y marcas comerciales registradas con nombres que sugieren un origen europeo. Estas prácticas cumplen formalmente con la normativa, pero en la práctica fomentan la opacidad y pueden inducir a error al consumidor, que asume implícitamente que se trata de arroz nacional o comunitario.