Las precipitaciones de los útlimos días permiten a Cataluña ganar días y alejar las restricciones al menos hasta marzo
Pantano con sus reservas visiblemente mermadas por la sequía. / JA
Efeagro.
Las lluvias intensas de los últimos días no han acabado con la sequía, pues las reservas de las cuencas internas están aún bajas, al 32,3%, pero han servido para “ganar días” y alejar las restricciones de la fase de excepcionalidad al menos hasta marzo.
“Hemos ganado días; si no llueve más, que esperamos que llueva más y bien, hasta marzo no entraríamos en fase de excepcionalidad”, ha expresado el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, en el pleno del Parlament.
Ha admitido que, a resultas del cambio climático, la situación puede ser “un punto esquizofrénica”, ya que el pasado lunes tuvo una reunión para hacer frente a las lluvias intensas de la DANA y el martes asistió al Comité Interdepartamental de Sequía del Govern.
En esta última reunión, se constató que esas lluvias intensas en Cataluña no se han traducido en un gran aumento de las reservas en los principales pantanos, ya que las precipitaciones fueron abundantes en el litoral pero escasas en el interior, en las cabeceras de los ríos que alimentan los embalses.
“Ha llovido mal”, ha resumido Illa, que no obstante ha indicado que las precipitaciones han permitido “ganar días” para la entrada en la fase de excepcionalidad del sistema Ter Llobregat.
Antes de la DANA, la previsión era que este sistema podría entrar en fase de excepcionalidad, si no llovía, en diciembre, pero con las últimas precipitaciones este escenario se aleja al menos hasta marzo.
El sistema Ter Llobregat, el más grande de Cataluña y que abastece a seis millones de habitantes en Barcelona y Girona, está actualmente en fase de alerta (la previa a la excepcionalidad) y sus pantanos están al 34 % de su capacidad, según datos de la Agencia Catalana del Agua (ACA).
Son tres puntos porcentuales más que hace una semana, un crecimiento que, sin embargo, podría haber sido más acentuado si hubiera llovido de forma abundante en las cabeceras de los ríos, en lugar de hacerlo en la costa.
En el conjunto de los embalses de las cuencas internas, las reservas están al 32,3 %, cuando hace una semana se situaban en el 29%.
En la provincia de Tarragona, donde sí ha llovido con más intensidad los últimos días, es donde se ha notado más el crecimiento de pantanos. Destaca el de Riudecanyes, en la comarca del Baix Camp, que hace unas semanas estaba prácticamente vacío y ahora está al 14 % de capacidad.
Los pantanos de la Confederación Hidrográfica del Ebro, que abastecen esencialmente la provincia de Lleida y el sur de Tarragona, son los que presentan mejor estado: están al 64% de capacidad.
