El valor de las importaciones españolas de frutas y hortalizas frescas procedentes de Marruecos en el primer semestre del año se situaron en 899,5 millones de euros, lo que supuso un crecimiento interanual del 33%

Marruecos es el primer proveedor del mercado español de importación en valor y el segundo en volumen, tras Francia. / Archivo
Valencia Fruits. Redacción.
De enero a junio de 2025 las importaciones españolas de frutas y hortalizas procedentes de Marruecos crecieron un 33% interanual, tanto en volumen colmo en valor, totalizando 377.842 toneladas y 899.548.000 euros respectivamente, manteniendo el fuerte crecimiento de los últimos años, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales, procesados por FEPEX.
En el periodo analizado y en los últimos cinco años, las compras a Marruecos han crecido un 58% en valor, pasando de 571,4 millones de euros en el primer semestre de 2021 a 899,5 millones de euros en el mismo periodo de este año.
En volumen, las compras a Marruecos en los últimos cinco años también han crecido, un 8% pasando de 348.112 toneladas en el primer semestre de 2021 a 377.842 en el primer semestre de este año.
Marruecos es el primer proveedor del mercado español de importación en valor y el segundo en volumen, tras Francia, país desde el que se importaron 589-974 toneladas por un valor de 254 millones de euros.
Para FEPEX este crecimiento continuado de las importaciones procedentes de Marruecos esta provocando el desplazamiento de algunas de las principales frutas y hortalizas producidas y exportadas por España, como el tomate, y se ha debido, en gran medida, a que los precios de entrada, establecidos en el Acuerdo de Asociación de la UE con Marruecos, no han cumplido con su función de proteger el mercado comunitario y se han quedado obsoletos, impulsando la importación. Por ello, para FEPEX es imprescindible su reforma, con el objetivo de asegurar la viabilidad de este cultivo de gran importancia social y económica en las regiones que lo producen.
FEPEX considera también prioritario que se cumplan las sentencias del Tribunal de Justicia de la UE sobre el Sahara del 4 de octubre de 2024, que establecen la exclusión de las producciones del Sahara de las ventajas arancelarias del Acuerdo de Asociación y la obligatoriedad de identificar el país de origen. De lo contrario, el crecimiento de las producciones del Sahara impulsará aún más las importaciones de la UE, en detrimento de la producción comunitaria y deteriorando la soberanía alimentaria.