La Unió afirma que una de las causas de los mermados aforos es el bajo rendimiento de estas plantaciones envejecidas

Aproximadamente un 35% de las plantaciones citrícolas de la Comunitat Valenciana tiene una edad superior a los 25 años. / La Unió
Valencia Fruits. Redacción.
La Unió Llauradora reclama a la Conselleria de Agricultura un plan de reconversión citrícola para paliar el envejecimiento de las plantaciones a través de la implantación de las variedades comerciales más demandadas, la posibilidad de introducir nuevos patrones del IVIA más resistentes a la sequía o mejor adaptados al cambio climático y la eliminación de los problemas derivados de la polinización cruzada (pinyolà) que se lleva arrastrando desde hace mucho tiempo.
La organización considera imprescindible esta medida de apoyo, dotada con un presupuesto suficiente de al menos 2 millones de euros para este año y que desde La Unió se presentó en forma de enmienda a los grupos parlamentarios de les Corts, para garantizar la viabilidad del sector citrícola valenciano y asegurar su adaptación a las exigencias del mercado. Sin embargo, mientras ésta no fue aceptada, VOX y PP presentaron una enmienda de aproximación al presupuesto 2025 de Conselleria de Agricultura durante su tramitación en les Corts donde acordaron establecer una ayuda para subvencionar el cambio varietal citrícola y dotado con una cantidad insuficiente de solo 300.000 euros.
Hay que señalar que el sector citrícola valenciano ha experimentado una preocupante reducción de la producción en las últimas décadas. Hace 25 años, la producción era de 3.602.125 toneladas, mientras que hace 10 años se redujo a 3.178.687 toneladas y la última campaña fue de 2,7 millones de toneladas, lo cual representa una reducción de más del 23% en los últimos 25 años.
Por otra parte, la superficie citrícola en 2024 era de 153.623 hectáreas. En el año 2000 era de 191.551 hectáreas. Por lo tanto, en 25 años se han perdido 37.928 hectáreas, el 19,80%, es decir una quinta parte de la superficie citrícola de la Comunitat Valenciana. Paralelamente, las cifras indican que aproximadamente un 35% de la superficie citrícola valenciana tiene una edad superior a los 25 años y haría falta ese plan de reconversión para cubrir toda esta superficie.
Así mismo, cabe resaltar que el número de plantones de cítricos vendidos ha caído ligeramente en los últimos años, reflejo del estancamiento o retroceso de la superficie citrícola, especialmente en zonas tradicionales. Más del 70% de los plantones vendidos en España se destinan a la reposición de árboles viejos o cambio varietal, no a nuevas plantaciones extensivas.
Las principales causas de todo este retroceso en el sector citrícola son la baja rentabilidad pues los precios que perciben los productores son insuficientes para cubrir los costes de producción que han aumentado significativamente. A esto se suma un incremento en las plagas que requieren un mayor control. También es debido al envejecimiento de los árboles y falta de renovación. La baja rentabilidad impide a los citricultores reinvertir en la modernización de las plantaciones y además la edad avanzada de muchos productores dificulta el relevo generacional.
Por otra parte, hay demasiadas variedades obsoletas y está el problema de la polinización cruzada. Todavía hay variedades que generan fruta con semillas a causa de la polinización cruzada, hecho que afecta negativamente su comercialización, puesto que los consumidores prefieren fruta sin semillas. Es importante superar de una vez por todas el problema de la pinyolà con cambios de variedades polinizadoras por otras que no lo sean para lograr una citricultura más adaptada a las demandas del mercado.
Cabe señalar además que esta medida se enmarca en el acuerdo de 25 de febrero entre la Conselleria de Agricultura, las organizaciones agrarias y las cooperativas para abordar este problema y donde dice textualmente que “las plantaciones de cítricos con variedades que provocan polinización cruzada podrán acogerse a una línea de reconversión varietal específica para eliminar este problema entre los años 2025 y 2026.”