El tomate almeriense pierde superficie y valor

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El precio medio ha descendido esta campaña un 15% y el descenso en el valor de la producción se ha situado en un 8% según el balance realizado por Asaja-Almería

El tomate sigue perdiendo terreno en los invernaderos almerienses. / Archivo

Valencia Fruits. Redacción.

El balance de la campaña hortícola de Asaja-Almería confirma la tendencia de los últimos años en relación al pimiento como líder de la producción hortícola en la provincia superando las 12.000 hectáreas. Una hortaliza que ha ido conquistando la posición que años atrás tenía el tomate, en claro retroceso y que este año pierde no solo superficie, un 7,5% menos, sino también valor. Junto al tomate, judía, melón y sandía son los productos que mayor valor de producción han perdido en esta última temporada, a diferencia del comportamiento del resto de productos. En conjunto, el valor de la producción en la provincia de Almería sube un 5,6%.

Desde la organización agraria señalan que preocupa de forma especial la situación del tomate, por la pérdida de superficie y producción, que ha hecho además que este año tenga un precio medio un 15% por debajo del registrado en el ejercicio anterior y por un nuevo descenso en el valor de la producción que se ha situado en un 8%.

El ejercicio agrario ha estado marcado por las grandes diferencias e inestabilidad en las cotizaciones. Por un lado se registraron buenos resultados en la campaña temprana para la práctica totalidad de los productos; y en el lado opuesto, el resultado de la primavera ha estado marcado por la crisis de precios en cultivos como el calabacín, fundamentalmente, y melón y sandía, aún por acabar pero que ya dejan unas pérdidas que podrían superar los 75 millones de euros.

Atendiendo a la superficie este año ha subido ligeramente hasta situarse en unas 32.320 hectáreas (+1,2%). La superficie de pimiento ha aumentado un 5% y se afianza como líder en la provincia en detrimento del tomate, que mantiene su tendencia a la baja con un descenso del 7,5% (8.554 ha). El resto de productos experimentan subidas en superficie de alrededor del 2% excepto la judía que ha caído de forma acusada un 25%.

Asaja-Almería indica que, en líneas generales, el precio medio se queda prácticamente “congelado” y se sitúa en unos 46 céntimos, al igual que en la temporada pasada, pero este importe está por debajo del precio de hace tres campañas. Si a esto le sumamos que los costes de producción se han incrementado en estos tres últimos ejercicios alrededor del 25%, la sostenibilidad económica de las explotaciones es cada día más difícil.

La campaña 2021 de melón y sandía, ya en su recta final, deja unas pérdidas en Almería que podrían superar los 75 millones de euros

Esta situación es preocupante por la frecuencia con la que se vienen produciendo las crisis en las cotizaciones en origen. En Asaja-Almería indican que este año ha habido dos puntos negros. En primer lugar noviembre, que es un mes que se viene manifestando en los últimos años como “complicado” coincidiendo justo en el inicio de la campaña de invierno (tradicionalmente el punto fuerte de Almería) y “en la que tenemos mayor cuota de mercado en algunos productos”. Esta situación resulta paradójica observando los precios por ejemplo de la berenjena o el pepino en ese mes, con una media de 34 y 27 céntimos respectivamente. Y por otro lado, la campaña de primavera ha sido totalmente diferente a la pasada cuando los precios inusualmente buenos ayudaron a los agricultores a superar las pérdidas del invierno. En cambio, este año el sector ha vuelto a la dura realidad de sus últimas temporadas con precios malos para el productor, que ha sido especialmente complicado para el calabacín, con una media en primavera de apenas 27 céntimos, y ya posteriormente para melón y sandía, aún por cerrar.

En definitiva, y tras estos resultados, Asaja-Almería incide en la importancia de la planificación ordenada de la cosecha para poder ir ajustando la oferta a la demanda existente y evitar estas caídas de precios que ocurren frecuentemente. Además, es evidente que el sector necesita mecanismos eficaces y ágiles en gestión de crisis de mercado para dar una solución justa para todos los eslabones de la cadena y estable para los mercados.

Tomate

A pesar de la reducción de la superficie y el volumen de producción, el precio medio global de la campaña ha descendido alrededor de un 15%. La media del invierno, el momento fuerte de la campaña en este producto, apenas llegó a los 55 céntimos, un 19% menos en comparación con el pasado ejercicio. El momento más crítico se registró en febrero con un valor de apenas 35 céntimos. Por variedades, el tomate tipo pera es el que peor cotizó durante el invierno, y el precio del rama fue un 20% inferior al del año pasado y un 10% menor a la media de los últimos 9 años.

En cambio, el valor del tomate ha mejorado en primavera fundamentalmente debido a la reducción de plantaciones debido a las heladas, y al cambio de cultivo en detrimento del calabacín o la sandía.

Calabacín

El calabacín es uno de los productos que esta campaña ha tenido un mayor crecimiento productivo hasta alcanzar las 696.490 toneladas (+45,5%) y ha mostrado una importante inestabilidad en las cotizaciones, aunque el precio total de toda la campaña se incrementa un 3% respecto al año anterior.

No obstante, la temporada ha sido especialmente dura para los que han optado por el calabacín de primavera, que han tenido los peores precios de los últimos 9 años, un 26% por debajo de la media y un 42% inferiores a los de la pasada campaña. De hecho, la media de la primavera (marzo-mayo) para el calabacín ha sido de apenas 28 céntimos/kg, cuando la media habitual en esta época es de 34 céntimos.

Este producto ha tenido además otro momento clave que ha sido la entrada de la campaña de invierno, con unos precios durante noviembre y diciembre inferiores a los de la anterior cosecha en un 22%, y un 17% por debajo de la media de los últimos 8 años. Según Asaja-Almería, “el incremento de la superficie, y por lo tanto de la producción de este cultivo para momentos como el invierno, con temperaturas cálidas, y la mayor producción para primavera, estaría contribuyendo, junto a la competencia de otros países, a esta inestabilidad y malos resultados”.

Pepino

El pepino ha tenido una campaña complicada, y en la que ha tenido mucha influencia el momento de producción. Si bien el inicio de la temporada arrancó con cotizaciones un 50% por encima de las registradas durante el ejercicio anterior, sin embargo, con el desplazamiento del grueso de la cosecha al mes de noviembre, junto con otros factores, motivó la caída estrepitosa del pepino tipo Almería. En el caso de la primavera, el valor ha estado un 1% por debajo de la campaña anterior, y en la recta final apenas ha cotizado a una media de 20 céntimos/kg, un 13% por debajo de lo habitual. Al final, el precio medio se ha situado en unos 47 céntimos (+14%) motivando la subida también del valor de la producción en un 16%.

Berenjena

El precio medio de la berenjena se ha incrementado un 17% y se ha situado en 57 céntimos/kg. No obstante, esta hortaliza ha registrado bastante inestabilidad en las cotizaciones. La entrada de un mayor número de hectáreas en producción en el invierno, concretamente noviembre, provocó un descenso de precios quedando la media en apenas 33 céntimos, lo que supone el 50% por debajo de la media habitual de este producto en este mes. Afortunadamente la regulación de la producción con la bajada de temperaturas incrementó las cotizaciones y la media durante el invierno fue un 13% superior a la de la campaña anterior, pero se sitúa un 19% por debajo de la media de los últimos inviernos.

“Podríamos decir que se estrecha el cerco también en berenjena, ya que esta campaña justo en el momento en el que la provincia tiene el 90% del mercado, los precios, como hemos visto, han sido los peores de los últimos 9 años”, confirma Asaja-Almería.

La primavera tampoco ha sido buena para la berenjena con un precio medio de 29 céntimos, un 27% por debajo de la anterior campaña y un 12% por debajo de lo habitual para este producto en este periodo, cuya media es de apenas 33 céntimos.

Melón

Esta campaña se ha incrementado un 4% la superficie, hasta llegar casi a unas 3.000 hectáreas, acompañado además de una subida en la producción de alrededor del 30%, aproximadamente unas 150.072 toneladas. Sin embargo los precios bajos que se han registrado han motivado que, a pesar del incremento productivo, el valor de la producción haya caído un 35% respecto a la temporada pasada.

Aunque al inicio se comenzó con valores aceptables aunque ligeramente por debajo de los precios de las últimas dos temporadas, conforme se entró en plena campaña, a mediados de mayo las cotizaciones cayeron por debajo de los 20 céntimos. El precio medio ha caído un 48% respecto al año pasado, siendo la media de 0,27 euros/kg. Especialmente mala en precios para especialidades como el melón Amarillo y el Galia.

Sandía

La superficie de sandía total supera las 10.700 hectáreas. En la actual campaña se ha incrementado un 1%, sin embargo se ha producido un importante crecimiento de la producción total en un 10%, rondando las 540.000 toneladas. Al igual que con el melón, la sandía ha visto reducir su precio medio un 42%, situándose en unos 0,21 euros/kg. Esto ha provocado además una caída en el valor de la producción de un 49%, quedándose en unos 113 millones de euros.

Campaña estable para el pimiento

Para el pimiento, nuevo líder de la producción en Almería, y cuya superficie y producción se ha incrementado un 5%, la campaña ha sido bastante estable en lo que respecta a los precios, y especialmente si lo comparamos con la volatilidad y la inestabilidad que han presentado el resto de productos. De hecho, el valor medio de la temporada se ha incrementado alrededor del 20% (0,84 euros/kg). Entre los tipos que mejor se han comportado encontramos el California Rojo que es el que mejores precios ha registrado. En el lado opuesto, se sitúa tipo Italiano, cuyo precio medio ha caído un 3%.

Para Asaja-Almería, “la incógnita de este producto está en saber cuánta producción más será capaz de absorber el mercado, pues hemos de tener en cuenta también que nos encontramos con grandes competidores como Turquía o Marruecos”.

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