El vicepresidente y representante comarcal de La Ribera Alta de AVA-Asaja, Bernardo Ferrer, repasa en esta entrevista las primeras impresiones y las primeras cifras de la campaña de kaki

Según Bernardo Ferrer, el precio en origen se está situando entre 0,50 y 0,65 €/kg, adecuados para cubrir costes. / AVA ASAJA
Julia Luz. Redacción.
En una campaña en la que todavía resuenan los daños de la DANA del pasado octubre, el kaki afronta el inicio con cierto optimismo. Plagas más contenidas, episodios climáticos adversos más puntuales y unos precios en origen que, de momento, acompañan. Sin embargo, las reivindicaciones de AVA-Asaja siguen intactas: más materias activas para combatir las plagas, más implicación de las administraciones, un mayor esfuerzo de promoción y, sobre todo, la creación de una interprofesional que ponga orden en el sector y le dé la fuerza necesaria para ganar estabilidad y futuro.
Valencia Fruits. ¿Qué previsiones generales de cosecha manejan para el este ejercicio? ¿Se espera un fruto de buen calibre y calidad?
Bernardo Ferrer. El sector prevé una producción que puede superar las 300.000 toneladas, lo que supone una recuperación respecto a la campaña pasada que fue más corta. La principal causa es, en líneas generales, la menor afección que han tenido las plagas y enfermedades este año sobre el cultivo. Aún así, en algunos campos el cotonet no ha podido mantenerse a raya, y la mosca blanca, la mancha foliar y la última plaga en llegar, el trips de Sudáfrica, también suponen un riesgo para la cosecha.
Por otra parte, este año la Comunitat ha acumulado una barbaridad de tormentas de pedrisco. Contabilizamos al menos diez temporales donde la piedra ha golpeado duramente al kaki, con daños de hasta el 100% de los frutos en zonas localizadas de comarcas como la Vall d’Albaida, la Costera o la Plana Baixa. Esperamos que los campos que se han salvado del granizo y los ataques más virulentos de las plagas, alcancen una calidad excelente.
VF. ¿Qué perspectivas tienen en cuanto a los precios? ¿Cubrirán este año los costes de producción?
BF. Además de disponer de suficientes materias activas fitosanitarias para combatir las plagas y enfermedades, el otro reto capital del kaki es obtener unos precios en origen que sean capaces de cubrir la escalada de los costes de producción. Las cotizaciones en origen, que se sitúan entre 0,50 y 0,65 €/kg, no pueden bajar de ahí si aspiramos a cubrir los costes de producción.
Hay que tener en cuenta que os agricultores cada vez se ven obligados a gastar más dinero para conseguir que la fruta llegue a su óptimo estado de maduración con las mejores condiciones. Después de una primavera lluviosa, los meses de verano han caracterizado por una falta de precipitaciones y unas elevadas temperaturas, lo que obligó a realizar más riegos, con los sobrecostes en agua y energía eléctrica que ello supuso. Y en cuanto a la lucha contra plagas y enfermedades, los productores también han asumido sobrecostes porque son necesarios un creciente número de tratamientos.
VF. ¿Cómo ha afectado la DANA a las explotaciones? ¿Se ha recuperado ya el sector?
BF. El kaki fue uno de los cultivos más damnificados por la DANA. La sucesión de pedrisco, viento huracanado y lluvias torrenciales, además de la riada desde el interior de la provincia a la costa, acabó con más del 60% de la producción que quedaba pendiente de recolectarse, ya que el temporal irrumpió en medio de la campaña. Pero los daños fueron también a largo plazo, ya que muchas parcelas fueron arrasadas e incluso desaparecieron junto a cauces desbordados.
Cuando se va a cumplir un año de la DANA, muchos campos continúan sin ser reparados por TRAGSA y, en caso de haber sido demarcados por el Ministerio para la Transición Ecológica como Dominio Público Hidráulico (DPH), sus propietarios tampoco han recibido una indemnización justa por la pérdida de este patrimonio.
VF. ¿Ha habido otros episodios climáticos que hayan condicionado la campaña 2025?
BF. A lo largo de la primavera y el verano, zonas productoras de kaki han sufrido daños de diversa consideración a causa del pedrisco. Las principales tormentas tuvieron lugar los días 22 de abril, 3 de mayo, 8 de mayo, 4 de julio y 21 de septiembre, pero ha habido muchas más de carácter local que se cebaron con el kaki, una fruta que, por su piel más sensible, resulta especialmente vulnerable ante este tipo de adversidades climáticas. Además, la falta de lluvias y las altas temperaturas tampoco han sido de gran ayuda para el cultivo.
VF. El kaki es un cultivo especialmente sensible a las plagas, que en los últimos años han supuesto un gran quebradero de cabeza para los agricultores. ¿Cómo está siendo la situación en esta campaña?
BF. La escasez de soluciones eficaces contra las plagas y enfermedades sigue siendo un dolor de cabeza para los agricultores. Este año hemos vuelto a estar muy atentos a la evolución de cualquier amenaza, pero es evidente que las estrategias de prevención y control autorizadas no son suficientes. Si bien hemos podido minimizar, en general, los ataques de mosca blanca, trips, cotonet y mancha foliar, al menos de una manera menos devastadora que en años anteriores, AVA-Asaja sigue reclamando la autorización de más materias activas fitosanitarias y biológicas que tengan una eficacia contrastada y sean económicamente viables. Porque si no garantizamos una mínima producción, todo lo demás pierde sentido.
“AVA-Asaja sigue reclamando la autorización de más materias activas químicas y biológicas que tengan una eficacia contrastada y sean económicamente viables”
VF. ¿Cómo valoran la implicación de las administraciones en el control de plagas este año?
BF. La Conselleria de Agricultura, con el IVIA y el Servicio de Sanidad Vegetal en contacto permanente con los agricultores, es consciente del problema que genera la falta de soluciones eficaces contra las plagas y, además de aportar más presupuesto, nos consta que ha estado trasladando las reivindicaciones del sector al Gobierno. Pero en Madrid chocamos con un Ministerio de Agricultura que no levanta suficientemente la voz ante Bruselas y con un Ministerio para la Transición Ecológica que ni siquiera autoriza soluciones de control biológico, como la cría y liberación masiva del Anagyrus fusciventris, el parasitoide más eficaz contra el cotonet Pseudococcus longispinus, porque lo cataloga como especie exótica a pesar de que sus poblaciones son abundantes en el Mediterráneo. Si Madrid y Bruselas no cambian su política de autorización y registro de soluciones, el futuro del kaki y de la agricultura pinta negro.
VF. En cuanto a la comercialización, ¿se busca abrir nuevos destinos internacionales más allá de la UE?
BF. Siempre hemos estado a favor de abrir nuevos mercados exteriores, tanto en la Unión Europea como en países terceros donde han mostrado interés por consumir nuestros kakis. Hay pequeños avances, poco a poco, pero también importantes retrocesos que nos han penalizado, como el veto ruso que ya ha cumplido más de diez años, la pérdida también de Bielorrusia y Ucrania, ahora los aranceles de Estados Unidos… Estamos hartos de que, ante cualquier problema geopolítico, la UE sacrifique al sector agrario.
VF. ¿Qué papel juega la promoción del consumo en el mantenimiento de precios y en la apertura de mercados?
BF. La DOP Kaki Ribera del Xúquer ha hecho un gran trabajo de promoción para empezar a dar a conocer esta fruta extraordinaria a los consumidores. Pero es evidente que todavía queda mucho margen de mejora, ya que el kaki es todavía un desconocido para buena parte de la ciudadanía.
Teniendo la Comunidad Valenciana el 90% de la producción y la comercialización del kaki español y europeo, es una lástima que haya una falta de organización del sector. Ya es hora de dejar los egoísmos a un lado y poner en marcha una interprofesional seria y rigurosa que, como ocurre en otros cultivos, permita alcanzar consensos beneficiosos para todos los agentes que intervienen en la cadena de valor, como una coordinación más inteligente de las temporadas y el impulso de campañas de promoción a niveles más ambiciosos.
“Hay muchos agricultores que han arrancado sus árboles, porque no quieren a perder más dinero, pero también hay profesionales que están plantando más campos, porque ven en el kaki una oportunidad de futuro”
VF. Tras años en los que el cultivo del kaki se ha ido profesionalizando, pero también se ha vuelto más complicado por la presión de las plagas y otros factores, ¿en qué momento se encuentra actualmente el sector? ¿Sigue disminuyendo la superficie de cultivo?
BF. La superficie cultivada ha sido un indicador infalible, inequívoco, de la crisis de rentabilidad que ha venido sufriendo el kaki durante los últimos años, especialmente desde el veto ruso y la supresión de materias activas fitosanitarias.
“La superficie cultivada ha sido un indicador infalible, inequívoco, de la crisis de rentabilidad que ha venido sufriendo el kaki durante los últimos años”
Según la encuesta Esyrce del Ministerio de Agricultura, la Comunidad Valenciana tiene 14.200 hectáreas de kaki, tras retroceder unas 2.000 hectáreas en los años precedentes. Hay muchos agricultores que han arrancado sus árboles, porque no están dispuestos a perder más dinero, pero también hay profesionales que están plantando más campos, porque ven en el kaki una oportunidad de futuro, un cultivo que, con buen manejo y precios estables, puede resultar rentable a largo plazo.
VF. Para finalizar, ¿qué esperan de esta campaña?
BF. En el sector hemos aprendido a mantener la cautela hasta el último momento, porque sabemos que puede haber de manera inesperada nuevos ataques de plagas o más adversidades climáticas que arruinen el trabajo de todo el año, pero esperamos que, por un lado, los productores obtengan una cosecha adecuada y, por otro, que puedan conseguir una rentabilidad digna, ya que los precios en origen han estado teniendo un comportamiento razonable, a la vista de los altos costes de producción.
“El sector ha de mantenerse unido, gestionar de manera inteligente y remar en la misma dirección, porque todos vamos en el mismo barco y de todos depende que el kaki tenga el futuro que se merece”
Para concluir, me gustaría hacer un llamamiento, porque creo que el sector ha de mantenerse unido, gestionar de manera inteligente y remar en la misma dirección, porque todos vamos en el mismo barco y de todos depende que el kaki tenga el futuro brillante que se merece.
Acceso a la noticia en las páginas 16-17 del suplemento de kaki de Valencia Fruits.
Acceso íntegro al último ejemplar de Valencia Fruits.