La DO Kaki de la Ribera del Xúquer prevé concluir la campaña la primera semana de enero

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El objetivo de la denominación de origen es asegurar que el producto que llegue a los clientes tenga la misma calidad que antes del temporal de viento

Este año más complicado encontrar fruta de primera categoría. / ARCHIVO

Óscar Orzanco. Redacción.

Las empresas adscritas al Consejo Regulador de la DO Kaki de la Ribera del Xúquer preveían comercializar, tras descontar las pérdidas provocadas por el pedrisco en verano, unas 120.000 toneladas esta temporada. La campaña se estaba desarrollando con normalidad hasta que se desató el temporal de viento y afectó a buena parte de la fruta que quedaba en los árboles.

“Contábamos con un volumen de cosecha aceptable para atender la demanda, pero el vendaval ha provocado daños generalizados en toda la zona productora del kaki de la Ribera del Xúquer. Con rachas continuas de más de 100 kilómetros por hora, y con la fruta en el momento óptimo para su recolección, los perjuicios han sido cuantiosos. Hemos sufrido una pérdida de producción añadida a la que nos generó el pedrisco, que, atendiendo a lo que estamos viendo en las peritaciones, se situará entre un 30 y un 40% de la fruta que quedaba por recolectar para esta temporada”, señala Cirilo Arnandis, presidente de la DO Kaki de la Ribera del Xúquer.

Además, a partir de ahora, van a aumentar los costes de recolección y en los almacenes porque aunque los recolectores seleccionen en el campo la fruta con calidad para comercializar, siempre llega hasta los almacenes más kaki para destrío, o que finalmente hay que destinar a la industria. 

“Los procesos de clasificación deben ser más rigurosos y exhaustivos, y esto incrementa los gastos. En estos momentos, nuestro principal objetivo es asegurar que el producto que llegue a los clientes tenga el mismo nivel de calidad que antes del temporal de viento, a pesar del coste añadido que supone lograrlo. Es más complicado encontrar fruta de primera categoría, y esto lleva aparejado un mayor coste y un menor rendimiento, que repercute en las liquidaciones finales. Pero tenemos que recolectar fruta y mantener el mayor tiempo posible el producto en el mercado, con el máximo nivel de calidad, porque en la campaña precedente ya hubo muy poca producción y hay que seguir atendiendo a los clientes y consumidores. El ejercicio acabará antes, pero nuestro objetivo es llegar, aunque con menos oferta, hasta final de año o la primera semana de enero”, indica Cirilo Arnandis.

“No obstante —continúa el presidente de la DO Kaki de la Ribera del Xúquer— la oferta de producto para lo que resta de campaña se ha acortado. Y a medida que transcurra la temporada, las cantidades disponibles serán más pequeñas y no se podrá atender toda la demanda de los clientes”.

A pesar del desajuste provocado por el viento, las campañas de promoción de la denominación de origen seguirán en marcha para reforzar la marca de calidad y seguir dando a conocer el kaki entre los consumidores. “Vamos a seguir estando en el mercado y el Kaki Persimon® que va a recibir el cliente desde la denominación de origen tendrá el mismo nivel de calidad. 

Nos hubiera gustado llegar a más mercados, y durante más tiempo, pero la meteorología no nos lo ha permitido este año. La campaña que viene continuaremos”, concluye Cirilo Arnandis.