Paco Borrás: “Sandías y melones: hasta en los productos más clásicos hay cambios”

KANZI VOG

Los precios de sandías están siendo en muchos casos superiores a los melones

En exportación desde 2011 los envíos de melón se han estabilizado mientras que las sandías no paran de crecer, principalmente variedades sin semillas. / Óscar Orzanco

Paco Borrás (*)

La campaña pasada y la actual han sido por causas climáticas totalmente diferentes a las anteriores en el cultivo de sandias y melones. En ambos casos las productividades por hectárea se han visto mermadas generando, en diferentes momentos de las dos campañas, situaciones de tensión en el mercado que han repercutido directamente en los precios.

En particular en la campaña actual, las tormentas de mayo y junio afectaron de forma especial a las plantaciones de Murcia provocando una situación de precios a finales de junio y en julio totalmente desconocida en España. No se habían visto hasta ahora precios al detalle en cadenas de descuento por encima del euro en julio y parece que continuará.

Por otro lado, estamos viendo que los precios de sandías están siendo en muchos casos superiores a los melones, y tampoco esto se había visto normalmente con anterioridad.

En este punto, creo que no estamos sólo ante una situación puntual de fallo de cosecha de sandías. Estamos ante una situación de cambio del consumidor que hoy está comprando más sandía que compraba hace unos años como nos demuestran los informes del ‘Panel de Consumo en los Hogares’ del Ministerio de Agricultura y las informaciones de los volúmenes mundiales de comercio en sandías y melones.

La semana pasada se publicó el consumo en los hogares de 2022 lo que nos permite completar el cuadro del consumo de sandías y melones de lo que llevamos del siglo actual. Dicho cuadro nos muestra claramente que en el año 2000 se consumían 7,29 kilos de melones frente a sólo 5,30 de sandías Kg. La gráfica presenta una estabilización de consumo de melones y un crecimiento constante en sandías, superando estas a los primeros a partir del año 2014.

Si obviamos el caso singular del año pasado en el que las cifras de sandías y melones coincidieron, durante los últimos años se han consumido más sandías que melones en los hogares españoles.

Si observamos ahora lo que ha sucedido en el comercio mundial de estos dos productos, durante los últimos 20 años mediante los datos de las exportaciones mundiales de los mismos, tenemos el siguiente cuadro.

Vemos que el efecto es muy similar al ocurrido en los hogares españoles. Las cifras hasta el 2011 son muy similares pero a partir de ese momento los melones se estabilizan y las sandías no paran de crecer, independientemente de la singularidad del año pasado.

La causa de este proceso

Desde mi punto de vista la consolidación de las sandías sin pepitas y en particular la sandías sin pepitas Bouquet de Anecoop, que aparte de la propia fruta, aportó un esquema de trabajo que dignificó el producto, hizo marca, coordinó las diferentes zonas españolas de producción y la introdujo en el hemisferio sur.

Después llegaron otras marcas con concepto y el producto fue convenciendo al consumidor como los dos cuadros mostrados en este articulo demuestran, y aunque es verdad que a nivel de consumo doméstico en muchos países sigue estando el mercado dominado por sandías clásicas con pepitas, a nivel internacional las exportaciones hoy son casi todas de sandías sin semillas.

Pero, todo este proceso no hubiera sido posible sin la innovación de las diferentes casas de semillas que cuando observaron las posibilidades del producto dedicaron recursos a mejorarlo y el resultado está ahí. En estos momentos la disponibilidad de variedades de sandías sin semillas, que han mejorado la Reina de Corazones, es muy grande tanto en tamaños como en colores de la piel rayada o negra.

Sin lugar a dudas, estas casas de semillas también han dedicado recursos a los melones, pero no siempre en la evolución de los productos aparecen innovaciones radicales como la que supuso en su momento quitarle las semillas a un producto tan clásico como eran las sandías, que nadie se las imaginaba sin ellas.

Aunque este trabajo inicial de las casa de semillas no tendría continuación sin los agricultores que se apuntaron a la innovación, que siguieron mejorando el cultivo y que entraron de la mano de las estructuras de comercialización, con Anecoop en este caso en cabeza, articulando calendarios de cultivo en las diferentes zonas de producción para abastecer de forma ordenada el mercado. Todo ello con el permiso de la madre naturaleza, que de vez en cuando reclama su derecho a cambiar los ritmos climáticos.

Y el producto es tan clásico que el emoticono de las sandías tiene pepitas y seguramente no se las quitarán, aunque la mayoría de los que lo usen para comunicarse, comerán sandías sin pepitas. 

(*) Consultor hortofrutícola

Acceso al análisis en la página 5 del ejemplar de Valencia Fruits. 

Acceso al dossier de Melón/sandía 2 de Valencia Fruits. 

Acceso íntegro al último ejemplar de Valencia Fruits.