Las compras de Navelinas empiezan con precios de hasta 0,15 €/kg mientras los costes de producción se acercan a 0,30 €/kg
Valencia Fruits. Redacción.
Empieza la campaña de las naranjas nacionales y su entrada en el mercado ha dejado mucho que desear. El primer turno ha sido para las Navelinas, cuyo precio se ha desplomado hasta el punto de no llegar ni al 50% de los costes de producción – su precio medio está a unos 0,15 €/kg mientras los costes de producción se acercan a 0,30 €/kg -, además de sufrir unos contratos de compraventa totalmente abusivos.
El hecho de que los grandes lineales hayan hecho acopio de naranjas sudafricanas es uno de los motivos que explica la parálisis de compras de la naranja nacional y la caída tan drástica de sus precios. Además, ahora hay que sumar ese aumento desorbitado de costes debido al encarecimiento de la energía eléctrica, los combustibles, los fertilizantes y los tratamientos que los citricultores se han visto obligados a aumentar para tratar de frenar las plagas y enfermedades que, por si fuera poco, muchas de ellas también son importadas.
Más denuncias y más control
Por este motivo, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) denunciará a la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) los contratos de naranja abusivos. La asociación ha puesto en marcha una nueva campaña para intensificar la interposición de denuncias ante la AICA con el objetivo de que este órgano sanciones todas las prácticas abusivas en aquellos contratos de compraventa de cítricos donde el precio del producto no supera, como mínimo, los costes de producción.
AVA-Asaja urge al Gobierno a agilizar la investigación de estos abusos comerciales en un momento, además, en el que el Congreso de los Diputados acaba de aprobar una reforma de la Ley de la Cadena Alimentaria que prohíbe la venta a pérdidas en todos los eslabones y que ahora mismo está bajo tramitación por parte del Senado.
La organización exige una Ley de la Cadena Alimentaria clara y contundente que evite de una vez por todas los abusos comerciales que sufren los productores
Para la asociación, los bajos precios de las naranjas demuestran que los objetivos de la legislación no se reflejan en la realidad y, por eso, exige que la Ley de la Cadena evite de una vez por todas los abusos, impidiendo que los costes de producción que se toman como referencia para establecer precios no sigan dependiendo del poder de negociación de cada productor, porque eso le mantiene en una situación de debilidad, sino que sea un organismo público el que fije los costes de producción en cada eslabón de la cadena alimentaria.