El sector pide “fondos extraordinarios” para ayudar a paliar la crisis por la COVID-19, ya que las ayudas de 90 millones aprobadas por el Gobierno “no son dinero nuevo” sino dotaciones que ya estaban en el presupuesto
El presidente de la Organización Interprofesional del Vino, Ángel Villafranca, ha reaccionado así al conjunto de medidas aprobadas por el Ejecutivo, para apoyar al sector vitivinícola ante las dificultades por la pandemia.
“Es una crisis extraordinaria y necesitamos medidas y fondos extraordinarios, no ordinarios”, ha subrayado Villafranca, quien ha indicado que los 90 millones proceden de presupuesto que ya estaba asignado al sector y que la novedad es que se han reprogramado, para poder aplicar las medidas con el fin de solventar la crisis en esta producción.
Entre ellas, figuran la “destilación de crisis” o la autorregulación, que, para el presidente de la interprofesional son “positivas” y buenas, porque contribuyen a solucionar el problema de exceso de oferta.
Pero el sector “sigue demandando una solución definitiva” y que el viñedo entre dentro de los planes de recuperación de la Unión Europea (UE) tras la pandemia.
El consumo -especialmente el hostelero- y “la normalidad” no se van a recuperar a corto plazo y existe “mucha preocupación” en las bodegas, según el responsable de la interprofesional.
Villafranca ha añadido que el sector seguirá reclamando un fondo extraordinario, con financiación de la UE.
Las medidas aprobadas por el Gobierno incluyen la destilación de 2 millones de hectolitros de vino, el almacenamiento de otros 2,25 millones y la aplicación de la cosecha en verde para las comunidades autónomas que lo deseen.